Las elíéctricas acuden hoy a la subasta que determinará el precio de la luz durante el próximo trimestre. La mitad del recibo depende de esa puja; la otra, de la decisión unilateral del Gobierno, que ha confirmado que congelerá su parte.
Los españoles conocerán hoy, al menos de forma orientativa, cuál será el calado de la subida del recibo de la luz que el Gobierno previseblemente aplicará a partir del 1 de octubre. El precio de la electricidad viene determinado por dos partes que tienen un peso más o menos del 50% en el coste final: los peajes elíéctricos (que fija directamente el Ministerio de Industria) y otro componente variable que se determina a travíés de una subasta. Y esa subasta se celebra hoy.<
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Esa puja determinará el precio de la Tarifa de íšltimo Recurso (TUR), a la que se acogen más de 20 millones de clientes, la inmensa mayoría del total (unos 25 millones). En esta ocasión, la subasta será el único factor determinante para establecer la eventual subida de la luz para el último trimestre del año, dado que el ministro de Industria, Josíé Manuel Soria, ya ha confirmado su intención de congelar la mitad del recibo que depende directamente de la decisión gubernamental (como ya hizo en julio) y que recoge los gastos regulados del sistema elíéctrico.
No se espera una subasta disparada
Las elíéctricas que prestan el servicio de tarifa regulada (Endesa, Iberdrola, Gas natural Fenosa, HC y E.on) acuden a la subasta para adquirir a los productores potencia elíéctrica para el próximo trimestre. El precio medio al que la compran determina la cuantía de la parte no regulada del recibo de la luz. Fuentes del sector apuntan que los precios se han mantenido planos en relación a la anterior subasta (celebrada el 26 de junio), así que lo previsible sería que no se registraran grandes variaciones, informa Europa Press. Está por ver que se confirme la tendencia.
La decisión del Ejecutivo de congelar los peajes puede que haga que las elíéctricas presenten una nueva demanda ante Tribunal Supremo. Las compañías ya han elevado ante el alto tribunal decisiones similares en otras ocasiones, y siempre han salido victoriosas ante el Gobierno. Desde el sector se da por hecho que la congelación de los peajes se traducirá en una posterior facturación con carácter retroactivo de la subida que Industria debería haber decretado para garantizar que se cubren suficientemente los costes del sistema. De hecho, la congelación de los peajes es uno de los factores que ha hecho crecer el díéficit de tarifa (el desfase entre lo que cuesta generar la electricidad y el precio que se cobra) y lo ha elevado hasta los 24.000 millones de euros.
Las otras subidas
Los consumidores españoles vienen sufriendo en los últimos meses continuas subidas de su recibo de la luz. El Gobierno aplicó el 1 de julio una subida del 3,95% en el precio, solo el alza al que le obligaba la subasta (que cerró con un incremento del 9,3%), dado que entonces como ahora Industria congeló los peajes.
La subida de julio se sumaba al fortísimo incremento del 7% anunciado en marzo por la sentencia del Tribunal Supremo que obligaba al Gobierno a aplicar una subida retroactiva por anteriores congelaciones de la parte regulada del recibo. El Supremo permitía así a las compañías refacturar los consumos del último trimestre de 2011 y el primero de este año. Las elíéctricas están cobrando los atrasos mediante un prorrateo que se aplicará en las facturas entre agosto y diciembre.
Además de estas dos subidas del precio de la electricidad, el recibo de la luz tambiíén se ha visto directamente afectado por la subida general del impuesto sobre el valor añadido (IVA). Desde el 1 de septiembre, el tipo impositivo que se aplica al consumo de luz ha pasado del 18 al 21%, con el consiguiente golpe al bolsillo del consumidor.
Primera subasta tras el 'impuestazo'
La de hoy es la primera subasta que se celebra desde que el Gobierno anunciara, el pasado viernes, la creación de nuevos impuestos aplicables a los generadores de electricidad. El Consejo de Ministros ha aprobaba un anteproyecto de ley que creaba impuestos para todos los tipos de energía para ingresar 2.734 millones de euros el próximo año. Un primer paso de la esperada reforma energíética con el que se trata de tapar el agujero del sector elíéctrica.
El Gobierno impone un gravamen del 6% de los ingresos de las empresas de todas las tecnologías de generación elíéctrica, así como dos nuevos impuestos para las centrales nucleares, un canon del 22% sobre la producción hidroelíéctrica y tambiíén impuestos especiales (cíéntimo verde) para el gas natural, el carbón y el fueloil. Desde el Ejecutivo se ha venido insistiendo en los últimos meses que pretende repartir la factura de los problemas del sector entre las empresas, los usuarios y la propia Administración. Según el Gobierno, si se repercutiera enteramente el agujero del sector en el recibo de la luz, la subida sería del 43% de la tarifa.
La reforma elíéctrica busca enjugar el enorme agujero de 24.000 millones de euros que ya arrastra el sector y que crecería, según las estimaciones del Gobierno, a razón de entre 5.000 y 6.000 millones anuales de no tomar medidas para atajarlo. El límite legal del desfase está fijado para este año para 1.500 millones de euros y en 2013 tendría que ser cero. Soria asegura que con los impuestos anunciadas la pasada semana y otras medidas se cumplirá ese díéficit cero el próximo ejercicio
