Más muestras de la buena marcha de la economía islandesa. Según los datos difundidos hoy por la oficina nacional de estadísticas, la tasa de desempleo ha bajado al 5% de la población activa en septiembre, un punto porcentual menos que hace un año.
Islandia fue uno de los primeros países afectados por el estallido de la crisis financiera y en recibir la ayuda internacional. En 2010, el desempleo alcanzó su máximo al tocar el 12% en mayo de ese año, y desde entonces ha ido en descenso de forma continuada.
Con una población activa de 180.700 personas, solo 9.000 islandeses en edad de trabajar están desempleados. El resto, 171.700, tienen empleo. En tíérminos desestacionalizados, la cifra de parados aumenta hasta los 10.900 y la tasa se eleva al 6%, lo que tambiíén supone un descenso con respecto al 6,4% de agosto.
La oficina de estadísticas destaca que el paro es más pronunciado entre las mujeres que entre los hombres. La tasa de desempleo femenina se sitúa en el 5,7%, mientras que la masculina está en el 4,3%.
El caso de Islandia ha despertado el interíés por erigirse en ejemplo viviente de que se puede abordar la salida de la crisis de una forma distinta a la que propugna Bruselas. "En la recesión en Europa, nosotros fuimos el primer país en caer, pero tambiíén hemos sido la primera nación en salir. Si hay que sacar alguna lección de la recuperación islandesa, es que la austeridad, por sí sola, no funciona", aseguraba recientemente el ministro de Asuntos Exteriores y Comercio Exterior islandíés, í–ssur Skarpheoinsson.
En 2008, todo el sistema financiero de Islandia quebró, a lo que siguió una grave crisis crediticia, la decisión de nacionalizar a los tres principales bancos, el Kaupthing, Landsbanki y Glitnir. Tras recibir el dinero del FMI, 2,100 millones de dólares, el gobierno islandíés optó por avalar los depósitos de los islandeses y reestructurar toda la deuda extranjera. Además de los fuertes recortes impuestos por la autoridad internacional, el país nórdico devaluó su moneda, lo que ayudó a mitigar los efectos de la crisis impulsando las exportaciones.
"A día de hoy, tenemos una de las tasas de desempleo más bajas en Europa y un sólido crecimiento económico. El modelo islandíés funciona", destacaba el titular de Exteriores de Islandia.