Angela Merkel vuelve a condicionar el devenir de Europa al frenar la supervisión bancaria única hasta 2014. En la cumbre europea de ayer, reunión informal como anticipo a la cumbre formal de diciembre, la canciller alemana se enfrentó abiertamente a su principal rival, Franí§ois Hollande, que se posicionaba al lado de España recordando la necesidad de que la unión bancaria se materialice cuanto antes y contribuya a la recapitalización directa de los bancos.
De todos modos, los veintisiete han acordado preparar ya las bases legales para que tener este único supervisor a finales de este año, y ponerlo en marcha a lo largo de 2013.
La primera decisión, muy a nuestro pesar, es negativa para España. Mariano Rajoy, que ayer reconocía no haber tratado el tema del rescate en Bruselas, ya no tendrá tan a mano el reciíén estrenado fondo de rescate europeo para salvar a nuestros bancos. Y eso, claro está, no beneficia a nuestros bolsillos.
Las Bolsas europeas, que cerraban ayer sin novedades desde Bruselas, podrían abrir hoy en negativo, a juzgar por el comportamiento de sus futuros a esta hora (-0,2% de media). Dicen que la esperanza es lo último que se pierde, así que pese a los llamamientos de numerosos expertos para que no esperaran nada de esta cumbre, muchos inversores no se dejaron convencer y apostaron ayer por las compras. La píérdida de momentum, sin embargo, podría dar la vuelta hoy a la evolución alcista. En Estados Unidos, el comportamiento negativo de Google provocó caídas en el sector tecnológico y, de rebote, en el resto de selectivos (Dow Jones: -0,06%; S&P 500: -0,24%; Nasdaq: -1,01%), al tiempo que en Asia los índices se han desinflado y el Nikkei apenas si ha subido un 0,22%.