Indra, empresa de servicios informáticos que cotiza en el Ibex 35, ha presentado a la CNMV una caída del 21% en su “resultado atribuible recurrente†de enero a septiembre, hasta 114,8 millones de euros. El “resultado atribuible†se ha reducido un 36%, hasta 93 millones de euros.
Por su parte, las ventas de grupo se han elevado un 10%, hasta 2.120 millones de euros, mientras la cartera de pedidos ha subido un 13%, hasta 3.542 millones.
En otras magnitudes, el EBIT de los nueve primeros meses del año ha bajado un 25%, hasta 152 millones de euros, mientras el margen EBIT ha caído hasta el 7,2% desde el 10,5%. Por último, la deuda neta ha aumentado un 36%, hasta 661 millones de euros.