Nasdaq Wednesday’s Close
Por... ANNE D'INNOCENZIO
NUEVA YORK -- Deja esa pierna de pavo en el plato. Es hora de ir de compras.
Es común que las tiendas en Estados Unidos abran en las primeras horas de la mañana el Viernes Negro -un día despuíés del Día de Acción de Gracias-, llamado así porque es cuando los comercios recuperan sus ganancias del año y regresan a números negros.
Pero el inicio del Viernes Negro se ha ido adelantando cada vez más en los últimos años y ahora tiendas como Wal-Mart y Toys R Us están abriendo sus puertas la noche del Día de Acción de Gracias con la esperanza de que los estadounidenses estíén dispuestos a comprar tan pronto terminen de comer su tarta de calabaza.
Wal-Mart Stores Inc. abrirá a las 8 de la noche, dos horas antes que el año pasado. Target Corp. a las 9 pm, tres horas antes que en 2011. Sears, que el año pasado no abrió, abrirá a las 8, igual que Toys R Us, una hora más temprano que hace un año.
Es un esfuerzo que hacen las tiendas para facilitar las compras a los estadounidenses, que todavía enfrentan incertidumbre económica. Muchos clientes están preocupados por el desempleo y el paquete de impuestos y recortes al gasto conocido como precipicio fiscal que entrará en vigor en enero a menos que el Congreso apruebe un presupuesto para entonces.
Al mismo tiempo, los estadounidenses están cada vez más confiados de comprar en sitios en internet como Amazon.com, donde pueden obtener precios más bajos y desde la comodidad de su casa o cubículo de oficina.
Esto ha puesto presión para competir a las tiendas de ladrillo y mortero, que llegan a percibir hasta 40% de sus ingresos anuales en los dos meses que dura la temporada de compras de fin de año. Esto se ha vuelto más difícil: la Federación Nacional de Minoristas, una agrupación industrial, calcula que las ventas totales de noviembre y diciembre aumentarán 4,1% este año a 586.100 millones de dólares, casi el mismo crecimiento que el año pasado. Pero la parte en internet se espera que crezca 15% a 68.400 millones de dólares, de acuerdo con Forrester Research.
Como resultado, las tiendas tradicionales están probando toda estrategia que se les ocurre para atraer a los clientes facilitando las compras tanto como puedan. Además de extender sus horas al Día de Acción de Gracias, muchos ofrecen apartados y envíos gratuitos, igualan los precios de rivales en internet y actualizan sus aplicaciones para dispositivos móviles con más información.
Pero no a todos les agrada la idea de comprar el día del pavo. Algunas tiendas están siendo criticadas por los trabajadores que se quejan de que el jueves debe ser un día para que todos puedan estar en familia y no atendiendo a los clientes.