El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el embajador de Estados Unidos, Alan D. Solomont, presentarán el próximo lunes el nuevo convenio de doble imposición entre ambos países.
El convenio de doble imposición entre España y Estados Unidos verá la luz tras más de dos años de intensas negociaciones. Este acuerdo fiscal, que entre otros objetivos, persigue facilitar las inversiones recíprocas y evitar que una compañía con intereses en ambos países pague impuestos por un mismo concepto en la Agencia Tributaria española y estadounidense. Las empresas son las principales interesadas en este pacto que, en principio, debería reducir trámites burocráticos.
El actual y todavía vigente convenio de doble imposición entre Estados Unidos y España se aprobó en 1990 y estaba muy centrado en evitar la evasión de impuestos en el IRPF. Tras la firma del lunes, deberán ser los Parlamentos de ambos países quienes otorguen el visto bueno definitivo.
En materia fiscal, España ya firmó recientemente el bautizado como acuerdo Fatca, un pacto entre Estados Unidos y los mayores países de la UE (Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y España) para compartir e intercambiar información tributaria. A cambio, las empresas de estos países que actúen en otros Estados vinculados al acuerdo Fatca contarán con menos trabas burocráticas y, en algunos casos, no sufrirán ciertas retenciones.