PONE EN MARCHA EL ARBITRAJE POR UN TOTAL DE 5.000 MILLONES
1
Enviar
5
2
0
inShare.0
Meníéame
Imprimir Los ahorradores particulares que compraron participaciones preferentes de Caja Madrid y deuda subordinada de la actual Bankia sabrán oficialmente en breve quiíén va a decidir si tienen derecho o no a recuperar el dinero invertido en estos políémicos productos. El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha elegido a KPMG para analizar mediante un arbitraje cuántos de los 187.000 afectados fueron engañados y pueden reclamar su inversión.
Fuentes próximas a Bankia y al FROB han confirmado la elección de KPMG para este trabajo en el que tanto la entidad como el Ministerio de Economía se juegan gran parte de su credibilidad. Para el equipo de Josíé Ignacio Goirigolzarri, se trata de una operación fundamental para resarcir el daño causado por el anterior equipo gestor a una gran parte de su clientela, muchos de los cuales se pueden llevar el dinero de las sucursales si no consiguen una buena compensación.
Para el Gobierno, es la oportunidad de encontrar un camino para que los afectados recuperen parte de lo perdido, lo que le puede ser muy útil. Con ello conseguiría maquillar el uso de dinero público para financiar el mayor rescate de una entidad financiera en la historia de España. Solo Bankia ha costado 24.000 millones de euros, que se pagarán con fondos estatales.
Por eso, tanto el FROB como Bankia le han dado instrucciones a KPMG para que el proceso sea totalmente transparente y beneficioso para el mayor número de afectados posibles. La consultora se encargará de elaborar los criterios financieros, personales y íéticos para seleccionar a aquellos clientes que tienen derecho a percibir el 100% de lo invertido o descartar a los que se consideren que eran conscientes del riesgo de donde ponían sus ahorros.
El trabajo será arduo porque KPMG tiene que examinar uno a uno los informes de los 187.000 inversores particulares o empresas que suscribieron las acciones de preferentes de 1999, 2002 –íéstas de Bancaja-, 2004 y 2009 (Caja Madrid), así como las emisiones de deuda subordinada. En total, todos estos activos conocidos como híbridos suman unos 5.000 millones de euros.
Las fases y el antecedente
Antes de reclamar el dinero a travíés del arbitraje, los preferentistas de Bankia tendrán que aceptar el canje de sus participaciones por acciones del banco cotizado, con el descuento medio del 43% que ha impuesto la Comisión Europea (11% para la deuda). Una vez que tengan los títulos en su poder, la entidad les comunicará la apertura de un periodo de tiempo determinado para que acudan a las oficinas y rellenen el formulario para que su caso sea analizado por KPMG.
Si la consultora considera que cumplen los requisitos para solicitar la compensación, su expediente será sometido al juicio del árbitro, que previsiblemente será algún organismo de la Consejería de Consumo de Madrid o de la comunidad autónoma respectiva. En cualquier caso, según distintas fuentes, el dictamen de KPMG será dado por bueno puesto que su objetivo es proteger los derechos de los afectados.
Bankia creará una página web para facilitar a los inversores su reclamación que, no obstante, invalidará cualquier demanda posterior. Si el ahorrador se somete al arbitraje, tendrá que aceptar el resultado y comprometerse a renunciar a cualquier litigio, ya sea administrativo o penal. Si la sentencia es positiva, como el preferentista ya había recibido el 43% de su inversión en acciones, Bankia se las recomprará y les dará el 100% de lo suscrito en dinero en efectivo, descontados los intereses ya percibidos durante los años en los que ha tenido las preferentes en su cartera.
Fuentes próximas al FROB desconocen cuántas personas recurrirán a esta vía. Tienen como referencia el caso de Novagalicia, que tambiíén comercializó participaciones preferentes a clientes con escasos conocimientos financieros. En concreto, la entidad fruto de la fusión de Caixanova y Caixa Galicia colocó 903 millones entre cerca de 80.000 inversores, de los cuales han reclamado 48.000.