Los bancos españoles están haciendo bueno el viejo axioma bursátil que reza que “el último cíéntimo, que lo gane otroâ€. Los brokers de las seis entidades financieras del Ibex han puesto la maquinaria vendedora de sus propias acciones a pleno rendimiento. La ganancia media del 16% en 2013 y la posibilidad de que la CNMV levante el veto sobre las apuestas bajistas el próximo día 31 son las dos grandes justificaciones para soltar lastre.
Desde el 31 de diciembre, los brokers de BBVA, Santander, CaixaBank, Popular, Sabadell y Bankinter han vendido acciones propias por valor de 750 millones de euros. A los precios actuales, han decidido que es hora de limpiar lo máximo posible el saldo de autocartera y dejar la escopeta bien cargada por si toca volver a defender las cotizaciones. Aunque algunas grandes firmas internacionales como JP Morgan creen que la banca europea tiene aún un potencial alcista del 20%, en los cuarteles generales de las grandes entidades nacionales prefieren nadar y guardar la ropa.
“Despuíés del rally extraordinario desde los mínimos de julio del año pasado, los bancos están haciendo caja. Habían adquirido mucho papel a precio de saldo y están vendiendo con grandes plusvalías. No tienen por quíé esperar para deshacerse de las acciones porque el mercado se puede dar la vuelta en cualquier momentoâ€, señalan en una de las grandes mesas de contratación extranjeras.
La relajación de las normas de las normas de liquidez de la banca y la caída de la prima de riesgo –hasta un máximo del 15%- en el arranque del ejercicio han abierto a la banca una enorme ventana por la que colocar sus propias acciones. Una oportunidad de oro que llega a apenas 10 sesiones de la fecha límite para que la CNMV decida si mantiene o no la prohibición sobre las posiciones cortas.
Las cifras demuestran que los bancos se están curando en salud ante la posibilidad de que esta operativa tenga impacto bajista a corto plazo. Sobre todo CaixaBank y BBVA, los dos más activos en lo que llevamos de año.
El banco que preside Francisco González ha vendido el 1% del capital en las tres primeras semanas del año. Ha realizado ventas netas por valor de 424 millones de euros en plena subida del valor, que acumula una ganancia del 13% en lo que va de 2013. El resultado es que su autocartera se había reducido hasta el 0,28% hasta el pasado 9 de enero, el nivel más bajo desde que empezó la crisis.
Desde esa fecha el ‘broker’ del banco ha sido el mayor vendedor de acciones de BBVA. Se ha desprendido de otros 24 millones de títulos, por lo que el porcentaje de autocartera –el más bajo entre los valores del Ibex- podría ser aún menor.
En la misma línea está CaixaBank. Su firma de bolsa ha movido el 1,2% de las acciones del grupo por valor de algo más de 150 millones de euros. La autocartera cae hasta el 0,84%, el nivel más bajo desde que el banco catalán empezó a cotizar en bolsa en sustitución de Criteria.
La excepción de Santander
En cuatro de los seis bancos de Ibex, el propio broker ha sido el mayor vendedor. Es el caso de los citados BBVA y CaixaBank, así como de Sabadell y Bankinter. Los dos bancos medianos han colocado en el mercado a travíés de sus propias firmas bursátiles el 0,73% y el 0,83% del capital, respectivamente, por un valor conjunto de unos 65 millones de euros.
Las excepciones son Popular y Santander. Especialmente el banco cántabro, cuyo bróker apenas ha colocado 4,7 millones de títulos en el mercado. Dentro del proceso de fusión con Banesto, el banco que preside Emilio Botín tiene previsto entregar como canje de las acciones de la filial títulos propios en autocartera, que ahora asciende al 1,98% del capital, la cifra más alta con diferencia en el sector.
