El capital riesgo ha puesto sus ojos en la antigua SOS, ahora denominada Deoleo. El líder mundial del aceite de oliva ha despertado el interíés de varios fondos extranjeros, entre ellos uno anglosajón con capital de la comunidad judía y otro latinoamericano, según han afirmado fuentes del sector financiero y agroalimentario.
La baja cotización de la empresa española justifica el interíés foráneo. Deoleo es una de las compañías más azotadas por la crisis bursátil de los últimos cinco años. Ha pasado de tener un valor de mercado de 1.500 millones de euros a valer poco más de 300. Pese a haber subido un 10% desde el inicio del año, las acciones cotizan actualmente a tan sólo 0,31 cíéntimo por título, un precio “muy bajoâ€, en opinión de los analistas, si se tiene en cuenta que la compañía tiene el 22% de cuota de mercado mundial en aceite de oliva envasado gracias al posicionamiento de sus marcas españolas, Carbonell y Koipe, e italianas, Bertolli, Carapelli y Sasso, que son líderes en los principales mercados de Europa, Amíérica, Asia y Oceanía.
Además, en el capital de la empresa presidida por í“scar Fanjul hay un nutrido número de cajas deseosas de vender y hacer cash. A la cabeza Bankia con el 18,6% del capital y el imperativo desde Bruselas de deshacerse de su cartera industrial. En el líder aceitero tambiíén participa la Caixa, que tras la fusión con banca Cívica se ha quedado un 5,9%; BBK, con, el 5,7%; y la superviviente Mare Nostrum, con otro 5,5%.
Cierto es que en contra de Deoleo sigue jugando una astronómica deuda. La compañía lleva varios años sumida en una gran reestructuración de costes y desinversión en activos no estratíégicos para reducir una deuda que alcanzó los 1.500 millones de euros. La dueña de Carbonell cerró 2012 con un endeudamiento de 620 millones de euros, según los datos anticipados por la compañía, una cifra que dobla la capitalización bursátil de la empresa.
Pero la reestructuración llevada a cabo comienza a dar sus frutos. Deoleo registró una píérdida neta de 1,26 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone reducir en un 73,9% los 'números rojos' contabilizados un año antes.
El beneficio bruto de explotación (ebitda) creció un 30,9% entre los pasados meses de enero y septiembre, hasta sumar 62,40 millones de euros. La empresa aceitera continuó su expansión internacional, de forma que a cierre de los nueve primeros meses generó fuera del mercado domíéstico el 73% de su facturación y el 85% del ebitda.
Deoleo ha adecuado su estructura para hacerla más competitiva y preparada para los retos del futuro. Así, la plantilla ha pasado de 2.149 personas a 31 de diciembre de 2010 a 817 personas el pasado mes de noviembre.
El interíés de los fondos extranjeros por Deoleo no ha pasado desapercibido al sector agroalimentario, donde se considera a la empresa aceitera como “estratíégica†para la economía española. De hecho, Asaja, la principal organización agraria del sector, ya ha comunicado al Ministerio de Agricultura su preocupación por que la compañía “caiga en manos foráneas†y las consecuencias que ello podría tener para las más de 50.000 familias que viven de cultivar la aceituna.
De hecho, la compañía prevíé cerrar en "los primeros meses de 2013" la operación acordada el pasado mes de octubre con Hojiblanca, por la que Deoleo adquirirá esta marca y la planta industrial de Antequera, mientras que la cooperativa agrícola entrará en su capital con una participación del 9,63%.
Hojiblanca, una cooperativa integrada por agricultores, se convertirá así en accionista de referencia de la aceitera, junto al otro socio industrial: Ebro Food, que controla el 9,3%