Barclays se prepara para anunciar este martes el cierre de su controvertido departamento de planificación fiscal, que asesora a clientes de la entidad sobre cómo reducir su factura fiscal, así como el recorte de al menos 2.000 puestos de trabajo en el área de banca de inversión en el marco de una profunda revisión de las prácticas en el seno de la institución liderada por su nuevo consejero delegado, Antony Jenkins, quien accedió al cargo el pasado mes de agosto, según informa la prensa británica.
Los títulos de Barclays suben un 0,89% en Londres.