El Dow Jones, el principal indicador de Wall Street, encadenó su sexto máximo histórico consecutivo tras cerrar con una subida marginal del 0,02%, aunque el S&P 500 se alejó de su ríécord. El Dow Jones, que durante buena parte de la sesión registró moderados recortes, consiguió remontar en la última hora de cotizaciones y sumar 2,77 puntos, que le bastaron para firmar el mayor nivel de cierre de su historia: los 14.450,06 enteros. Ese índice, que agrupa a 30 de las mayores empresas cotizadas de EEUU, ha acumulado ocho jornadas consecutivas de avances por primera vez en dos años.
"Desde que comenzó el año, el recorrido de la bolsa ha sido ordenado, calmado y generalizado, lo que típicamente describe a un mercado que sigue queriendo subir", dijo a MarketWatch el jefe de estrategias de mercado de US Bank, Terry Sandven.
No tuvo la misma suerte el selectivo S&P 500, que si bien el lunes había quedado a un suspiro de su ríécord, los 1.565,15 enteros que alcanzó en 2007, se alejó de ese nivel al bajar el 0,24 (3,74 puntos) y quedar en 1.552,48.
Presionado por el descenso del sector tecnológico, que se dejó en su conjunto un 0,55 %, el índice compuesto del Nasdaq descendió el 0,32% (10,55 puntos) para cerrar en 3.242,32 enteros, con lo que se replegó de su nivel más alto en doce años.
Aunque la jornada fue volátil, parecía que los inversores neoyorquinos se decantarían este martes por la recogida de beneficios despuíés de que el reciente rally de Wall Street llevase el lunes al Dow Jones a sumar cinco máximos históricos y al S&P 500 a quedar a menos de diez puntos de su propio ríécord. Se basaba esa posible recogida de beneficios en la ausencia de noticias macroeconómicas o resultados empresariales de relevancia en EEUU.
No ayudó a definirse a Wall Street la falta de rumbo con la que cerraron las bolsas europeas, despuíés de que la caía del 1,2% de la producción industrial británica se viera contrarrestada por unas previsiones económicas alentadoras en Alemania y exitosas subastas de deuda en España e Italia.
Tampoco pareció tener gran repercusión sobre el parquíé neoyorquino el plan presentado por el presidente del Comitíé de Presupuesto de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, que marcó el inicio del proceso de negociaciones en el Congreso para sacar adelante el presupuesto del año fiscal 2014. Ryan propuso recortar el gasto público en 4,6 billones de dólares hasta 2023, reducir los impuestos a individuos y corporaciones, y reformar los programas de beneficencia social, así como anular la reforma de salud.
En el ascenso marginal del Dow Jones tuvo que ver el repunte del 3,16% de la farmacíéutica Merck tras anunciar que un comitíé independiente le ha dado el visto bueno para continuar con los ensayos clínicos de su medicamento para el colesterol, Vytorin. Tambiíén destacaron en ese índice los avances de la tecnológica Hewlett-Packard (1,76%) y la aeronáutica Boeing (1,47%), esta última tras publicarse que se ha adjudicado un multimillonario pedido de la aerolínea de bajo coste Ryanair.
Fuera de ese índice, avanzó el 1,31% Yum Brands, matriz de cadenas de comida rápida como Pizza Hut o KFC, tras anunciar unas ventas mejores de lo previsto en China. Entre las empresas que cotizan en el Nasdaq y que no pertenecen al Dow Jones, resaltaron los descensos de Blackberry (-2,89%) y Apple (-2,16%).
En otros mercados, el petróleo de Texas subió a 92,54 dólares por barril, el oro ascendió a 1.591,5 dólares la onza, el dólar ganaba terreno frente al euro (que se cambiaba a 1,3034 dólares) y la rentabilidad de la deuda estadounidense a diez años retrocedía al 2,02%.
