Esta especie de anarco-moneda existe solamente en Internet
Ha marcado un ríécord de cotización y es una nueva amenaza para el euro
En plena batalla global de divisas aparece una nueva amenaza para el euro, virtual, pero no por ello menos a tener en cuenta. El bitcoin, una especie de anarco-moneda que existe solamente en Internet, ha marcado esta semana un nuevo ríécord de cotización y se vende a 37 euros la unidad.
En las últimas cuatro semanas prácticamente ha doblado su valor debido a que inversores de Malta están comprando en grandes cantidades. La sospecha de que lo que hasta hace poco no era más que una extravagancia de los frikis de internet se está convirtiendo en un producto fresco de inversión llama a las ganancias rápidas.
Diseñada para Internet, bitcoin funciona como moneda en la red y no se sujeta a la autoridad de ningún banco central, sino que ajusta su valor a un protocolo matemático ideado en 2008 por el japoníés Satoshi Nakamoto. Se trata de una especie de dinero Peer-to-Peer que permite pagos en línea sin pasar por instituciones financieras intermediarias.
Para poder utilizarlas, es necesario instalar una cartera bitcoin en el ordenador o elegir entre la variedad de aplicaciones móviles para iOS y Android. En casas de cambio como Bitstamp se pueden comprar los bitcoin con los que comenzar a interactuar, aunque tambiíén hay múltiples posibilidades de conseguir bicoin a cambio de trabajos o servicios, lo que en el argot se conoce como "ganarse la bitda". Otra posibilidad es la que se denomina "minar": utilizar los recursos de la computadora propia para generar divisas a base de intercambiar tiempo de procesador y energía elíéctrica por bitcoins. A diario, unos 20.000 usuarios minan sus ordenadores y hay dispositivos especiales para optimizar resultados que los usuarios compran por unos 1.300 dólares, lo que da una idea del nivel de rentabilidad.
Una alternativa
"Es sistema está funcionando y los mercados ya se han fijado en íél como alternativa. Muchos inversores reconocen que las cifras de capitalización de los mercados son fantasía y que los cinco millones de millones de euros que los europeos llevan en el bolsillo, convertibles en bitcoin, son un valor seguro", explica el jefe de bitcoin.de, Oliver Flaskí¤mper.
Más de 2.000 empresas y organizaciones aceptan ya el pago en esta moneda, que sirve igualmente para pedir una pizza, alquilar una oficina o incluso negocios con las drogas, según el periodista especializado Daniel Eckert, algo que favorece el alto nivel de anonimato que permite su uso. Deducido de las operaciones que genera, se estarían creando unos 25 nuevos bitcoin cada diez minutos, una tasa de emisión que deja atrás la Reserva Federal estadounidense en cuanto se pone en funcionamiento y supone ya más de la mitad de toda la moneda digital que circula en la red.
"El dinero se está reinventando. Los bancos centrales han abusado de su monopolio al poner el dinero al servicio de fines políticos y eso la economía no lo perdona, inevitablemente conducirá a la inflación, por lo que las monedas digitales son una buena alternativa", explica Thorsten Polleit, economista jefe de Degussa. El problema es que su altísima fluctuación hace del bitcoin un amoneda no apta para cardíacos, pero los analistas reconocen que se trata de una "alternativa viable".