A la espera de conocer el resultado de la emisión extraordinaria del Tesoro de deuda a 31 años, las ventas afloran en el mercado secundario. El interíés exigido al bono español supera el 4,3%, y la prima de riesgo toca los 250 puntos.
Los inversores interesados en deuda española, tanto pública como corporativa, se han encontrado en las últimas jornadas con una autíéntica avalancha de oferta. La semana comenzó con la exitosa colocación de CaixaBank, al menor coste desde 2010. El mayor boom se registró ayer. Telefónica, Santander Consumer Finance, Has Natural e Indra coincidieron a la hora de lanzar nuevas emisiones de bonos. Poco despuíés el Tesoro se sumaba a esta oleada con una emisión sindicada de deuda a muy largo plazo, con vencimiento en 2044. El mercado secundario asimiló ayer esta avalancha de oferta con un repunte en los intereses de la deuda. Al final, la prima de riesgo escaló desde los 240 hasta los 248 puntos básicos. El repunte continúa hoy, y el riesgo país alcanza los 250 puntos básicos. El intríés exigido al bono español a diez años supera el umbral del 4,3%, frente al 4,1% con el que cotizaba al inicio de este mismo mes. La evolución de la deuda en el mercado secundario podría venir determinada por el resultado de la emisión sindicada del Tesoro. En principio, hoy se conocerá los detalles de la colocación de deuda con vencimiento en 2044. Se trata de la primera emisión de un nuevo bono a más de 30 años desde 2009. El objetivo inicial del Tesoro pasa por colocar unos 3.000 millones de euros. El interíés podría situarse por encima del 5,1% con el que cotizan actualmente, en el mercado secundario, los bonos con vencimiento en 2041.
