De lo local a lo global con epicentro en París. El último proyecto de la firma de servicios financieros N+1 pasa por el sector inmobiliario y tiene acento francíés. La entidad española ha desarrollado una plataforma de inversión de ámbito europeo de la mano de Etienne Marcot, experto francíés en el mundo del real estate, donde ha desarrollado su carrera profesional en fondos de inversión, promotoras o gestión de activo en cabeceras como Stam, Gecina, Credit Mutuel o Banque La Híénin.
El renovado apetito por el ladrillo y la experiencia de varios proyectos internacionales previos (Alpina y Trinova) han animado a N+1 a dar el salto continental de forma ordenada y a largo plazo. El banco de negocios se ha embarcado en un proyecto europeo, coordinado por el socio Josíé Antonio Abad, que atienda la demanda de inversión existente en el sector inmobiliario, cubriendo los cuatro mercados geográficos más importantes: Alemania, Reino Unido, España y Francia.
Como filosofía del proyecto, la nueva plataforma ha renunciado a levantar un fondo de inversión convencional y ha optado por un modelo de gestión de cuentas separadas (management accounts), que permite ejecutar cada operación a un cliente particular. En base a esta estructura, más flexible que un fondo inmobiliario, N+1 REIT ofrecerá este servicio, creado para canalizar las inversiones patrimoniales de sus clientes, a inversores institucionales sin presencia en estos mercados.
De esta manera, los equipos locales serán los generadores de operaciones para sus mercados, mientras que desde París el equipo de Etienne Marcot coordinará la identificación de inversores institucionales de todo el mundo a los que pueda interesar esa inversión, tanto por la tipología del activo como por el volumen de la operación. Esta flexibilidad permite ampliar el perfil de actuación y de riesgo con otros productos como comercial, hotelero y residencial además de oficinas.
De inicio, la plataforma N+1 REIM cuenta con 1.200 millones de euros en activos bajo gestión, fruto de los 38 inmuebles que administra desde Alpina y Trinova, los equipos desarrollados hace años para invertir en Alemania y Reino Unido, cuando la alternativa al ladrillo nacional eran otros mercados continentales. Estos equipos geográficos se implementarán tambiíén en España (Luis Iglesias) y Francia, estando a su vez todos bajo el paraguas de la estructura de París.
En principio, tras la evolución del cliente particular al cliente institucional, este formato debería dar pie a un futuro fondo inmobiliario paneuropeo, sobre todo si bajo esta estrategia N+1 REIM consigue generar unas rentabilidades medias del 15%, la referencia imprescindible para competir en este mercado. Esta nueva apuesta convierte a la firma española en un nuevo player global, con capacidad para jugar en la liga de las grandes inversiones inmobiliarias que vuelve a generar el sector.