Verano negro para los Gallardo: el desplome de Almirall reduce su fortuna en 900 millones
"Verano negro". Así puede resumirse la situación para los hermanos Gallardo, máximos accionistas del grupo farmacéutico Almirall, desde que la compañía lanzó un "profit warning" (una advertencia sobre sus beneficios futuros) hace unas semanas.
Todo comenzó el pasado 10 de julio. El grupo controlado por Jorge Gallardo Ballart y Antonio Gallardo Ballart (poseen el 66,64% del capital de manera concertada, según los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores) anunció un recorte de sus estimaciones de ventas y EBITDA para este año 2017 debido a los problemas en su negocio estadounidense.
Y el pánico se apoderó de los operadores. En pleno verano, los títulos de la compañía se desplomaron un 24%, desde 12,23 euros hasta 9,80 euros por acción. En la jornada siguiente, sus acciones volvieron a hundirse cerca de un 10%, hasta 8,85 euros.
Bankinter recortó su consejo hasta "vender" desde "neutral", al señalar que "a corto/medio plazo la visibilidad sobre la compañía es reducida". Por su parte, los analistas de Credit Suisse recortaron un 38% su valoración, hasta 10 euros desde los anteriores 16 euros por título.
Los expertos del banco suizo perdieron "la confianza" en la directiva de Almirall y en la estrategia del grupo. "Recortamos nuestra previsión de beneficio por acción (BPA) entre un 35% y un 75% hasta 2021 para reflejar menores ventas, mayores costes y menores márgenes", afirmaron.
Credit Suisse añadió que "los inversores ya no darán a Almirall el beneficio de la duda en la ejecución de su estrategia", debido a la aparicion de serios problemas en los precios de la franquicia de Estados Unidos y a la continúa desaceleración de las ventas por el lanzamiento de nuevos productos. En su opinión, la transformación de Almirall en una compañía dermatológica sólida ha quedado en entredicho.
El pasado 24 de julio, la empresa presentó unas pérdidas semestrales de 73 millones de euros y confirmó los peores presagios. Las ventas cayeron un 11,5%, hasta los 378,9 millones de euros, y el grupo lo achacó a la "combinación de los acontecimientos inesperados ocurridos en el mercado de EEUU". Sus acciones cedieron cerca del 4%, hasta 8,70 euros.