Árima se convierte hoy en la tercera compañía en saltar al mercado continuo en 2018. Tras los retrasos registrados en su OPS, sus acciones debutan con caídas iniciales del 1%.
La firma inmobiliaria no pudo debutar con subidas, y bajó un 1% en su estreno en Bolsa, dado que marcó un primer precio de 9,90 euros por acción.