El tercer viernes del último mes de cada trimestre (marzo, junio, septiembre y diciembre) el mercado de derivados cobra especial protagonismo con motivo del vencimiento simultáneo de futuros y opciones sobre índices bursátiles y acciones. Es lo que se denomina 'cuádruple hora bruja', debido a las turbulencias y bandazos que puede llegar a generar la confluencia de todos estos vencimientos.