Los alcistas por fin se han llevado una mano. Sin embargo, y sobre todo en Europa, sería deseable que confirmasen los logros obtenidos, sobre todo en Europa, donde aún quedan algunos resultados empresariales.
En Wall Street, el Dow Jones conseguía un avance superior al 1%, y el principal índice tecnológico de Wall Street se conformaba con un 0,4%, en una sesión en la que tambiíén el dólar tomó aliento.
La jornada tuvo varias claves. Por un lado, el petróleo, que ha vuelto de nuevo a conceder una tregua a la renta variable. Su descenso ha venido esta vez por la posibilidad de que la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) convoque una reunión extraordinaria para afrontar los problemas que las revueltas en el mundo árabe pueden suponer al suministro mundial de crudo.
Por otro, la banca estadounidense, que ha apoyado en bloque las subidas, despuíés de que Bank of America anunciase que está entre sus objetivos más inmediatos la retribución al accionista.
Hoy, la temporada de resultados dará casi sus últimos coletazos en Europa. Anunciarán sus beneficios E.ON (se esperan 2,678 euros por acción en el conjunto de 2010), JCDecaux, EADS, Prudential, y la petrolera Tullow Oil. Y, en una jornada sin apenas datos económicos importantes, estaremos pendientes de la reacción de Iberdrola y de Renovables, despuíés de que la primera anunciase la absorción de su filial.