El operador móvil virtual (OMV) Pepephone, va a abandonar a Vodafone y tiene intención de llevarse a sus cerca de 450.000 clientes a las redes de Yoigo. ¿El objetivo? Ofrecerles algo de lo que ningún OMV puede presumir aún en España: acceso a redes de cuarta generación (4G). Y, ya de paso, mejorar significativamente sus tarifas. La compañía del macarra de lunares, uno de los pocos casos de íéxito entre OMV independientes, llevaba desde el mes de junio reclamando formalmente a la compañía británica que abriese el grifo de la 4G. Desde el pequeño operador aseguran que el contrato mayorista que tenían con Vodafone contemplaba expresamente esta posibilidad y lamentan las constantes negativas recibidas durante los últimos meses a la hora de hacerla efectiva. Y es que los tres grandes operadores con red propia están negando de forma sistemática a los OMV la capacidad de ofrecer a sus clientes este tipo de servicios. Aunque casi todos los operadores virtuales consideran que sus contratos les dan acceso a la cuarta generación móvil, Movistar, Vodafone y Orange coinciden en no ofrecer el servicio de forma sistemática. Y si bien es cierto que Amena sí tiene una oferta de 4G, es importante destacar que no se trata de un móvil virtual, sino únicamente de una segunda marca de Orange. "Los tres grandes están claramente coordinados para evitar que la 4G llegue a los virtuales. Han hecho fuertes inversiones en esta tecnología y quieren aprovechar la ventaja mientras puedan hacerlo", explica un experto, familiarizado con este tipo de negociaciones, que prefiere conservar el anonimato. Esto explicaría, por ejemplo, que Movistar no haya ofrecido esta tecnología ni siquiera a su propio virtual, Tuenti. La mudanza de Pepephone a Yoigo tiene, por lo tanto, importantes repercusiones, ya que servirá para abrir el grifo de la 4G a las pequeñas compañías. O eso, o los grandes se arriesgarán a perder más operadores virtuales a manos de la filial de Teliasonera. La operación, además, confirma que Eduardo Taulet, CEO de Yoigo, hablaba en serio cuando afirmó, el pasado mes de septiembre, que su compañía tiene "vocación empresarial de atender a los virtuales". Para Pepepehone, en todo caso, la operación no va a ser sencilla. La compañía de Javier Hidalgo y Rosauro Varo ha demandado por incumplimiento de contrato a la británica en un juzgado de lo mercantil y confía en poder comenzar en breve, y de forma paulatina, el cambio de operador. Un proceso caro y complicado, pues se verá obligada a cambiar la tarjeta SIM de todos sus clientes. Del resultado del pleito dependerá, además, si alguna de las partes debe indemnizar a la contraria. El director general de Pepephone, Pedro Serrahima, confirmó el cambio y lo atribuyó a la necesidad de no dejar a sus clientes sin una tecnología como la 4G, a la que estos conceden mucha importancia. De hecho, el directivo aseguró que de los clientes que ha perdido durante los últimos meses, una parte importante han salido de la compañía únicamente por no tener acceso a estas altas velocidades. "Nuestros clientes nos preguntan todos los días desde hace 9 meses por el 4G, y en nuestro contrato pone que lo debemos tener. Como siempre explicamos todo lo que hacemos, podemos explicarle a un cliente por quíé nos lanzamos a un proceso traumático y muy costoso a cambio de ofrecerles lo que esperan de nosotros. Lo que no podemos hacer es explicarle que nos quedamos de brazos cruzados sin hacer nada, sin saber hasta cuando y esperando a que alguien cumpla un contrato cuando el no cumplirlo es más beneficioso que el cumplirlo", afirmó Serrahima. "Es preocupante que, tras nueve meses desde el lanzamiento, ningún virtual de España tenga 4G y entiendo que esperaban que ninguno hiciíéramos nada y dejáramos pasar el tiempo sólo quejándonos. Hasta que hemos hecho esto, el statu quo garantizaba un año más por lo menos sin 4G en los virtuales. Para Pepephone era inaceptable", lamentó el directivo. El cambio tendrá, además, repercusiones favorables en lo que a precios se refiere, un aspecto en el que Pepephone empezaba a quedarse atrás, con un cierto desposicionamiento frente a operadores como Ono o Jazztel, que utilizan el móvil como complemento de su propuesta de fijo y que juegan con márgenes más bajos. La última propuesta de tarifa plana de Ono supone pagar menos de 20 euros por llamadas ilimitadas y 1Gb de datos. La oferta equivalente en Pepephone supone pagar más de 30 euros. Desde Pepephone confirman que este cambio no tendrá efecto alguno en la prestación de su servicio de ADSL, que seguirá ofreciendo con la colaboración de Vodafone. Tambiíén está por ver si los retos de la mudanza supondrán o no algún retraso en sus planes, aún incipientes, de operar en el sector elíéctrico. Fuentes de Vodafone insistieron en que su relación con Pepephone ha sido, durante todos estos años, cordial y beneficiosa para ambas partes y aseguran que, si no les han prestado servicios de 4G hasta la fecha, se debe a "una serie de complejidades tíécnicas, comerciales y de modelo de negocio". Asimismo, alegan que la frecuencia de 1800 MHz, en la que se está realizando el despliegue, no es el mejor entorno para este tipo de prestación mayorista. El acuerdo que ultima Pepephone con Yoigo le permitirá disfrutar exactamente de la misma cobertura que la filial de Teliasonera. Esto implica que la compañía de lunares utilizará las antenas de Movistar allí donde no lleguen las de Yoigo y que, indirectamente, los azules se verán beneficiados por el cambio. Se trata de la segunda gran espantada del sector de los virtuales desde que la CMT reguló este tipo de compañías. La anterior la protagonizó Euskaltel cuando, el pasado mes de julio, abandonó Vodafone para irse con Orange. La operación tambiíén recuerda al cambio de proveedor mayorista que efectuó la propia Yoigo cuando migró de Vodafone a Movistar en marzo de 2008.
