EFE
El control de capitales en Grecia, en vigor desde hace cuatro días, está afectando, aunque de forma desigual, a todos los sectores de la economía del país, con el comercio minorista como el mayor perdedor.
"El comercio minorista, con excepción de los alimentos y del gasóleo, se ha hundido en hasta un 70 %", declaró a Efe Nikos Yeorgokostas, responsable de datos estadísticos de la Confederación Nacional de Comercio y Empresas (ESEE).
Yeorgocostas afirmó que según los datos disponibles de los primeros días del corralito, el volumen de negocios semanal del comercio minorista caerá de los 230 millones de euros habituales a los 98 millones de euros.
"Por el contrario, el volumen de negocios de las tiendas de comestibles y de las gasolineras aumentó en un 20 %, de los 487 millones de euros semanales a los 585 millones de euros", añadió.
Esta reacción en la población de hacer acopio de productos esenciales para la vida cotidiana, refleja claramente el miedo que ha generado el control de capitales.
En el sector del turismo, la principal actividad económica de Grecia, los cuatro días de corralito tambiíén han dejado huella.
"Hay un descenso en las reservas de hasta un 30 % a un 35 %, pero, si la situación se normaliza, rápidamente podremos recuperarlas", dijo a Efe Xenofón Petrópulos, por parte de la Asociación de Empresas Turísticas Griegas (SETE).
No obstante, Petrópulos añadió que si bien hay ese descenso de reservas, "de momento no hay cancelaciones" y el control de capitales no ha influido negativamente en la impresión que tienen los turistas de Grecia.
"Es muy pronto para estimar quíé consecuencias puede tener el corralito en las exportaciones y en las importaciones", pues las que se están efectuando ahora se cerraron antes de entrar en vigor las restricciones, explicó a Efe Nikos Arjondís, director en la Asociación Panhelíénica de Exportadores (PSE).
El problema que está surgiendo es que en el extranjero algunas empresas dicen haber recibido llamadas de sus bancos alertándoles de que quizás sus pagos no llegarían a destino en Grecia
"Todo eso es un tema psicológico, no se trata de problemas reales", destacó Arjondís.
Según Arjondís, a la luz de la experiencia del corralito chipriota, en 2013, "podemos esperar una reducción de hasta un 7 % de las exportaciones y de hasta un 28 % de las importaciones", lo que se traduciría en píérdidas semanales de 80 millones de euros para las exportaciones y de 600 millones de euros para las importaciones.