Por... Paul Ausick
Ha sido un año difícil hasta ahora para el oro. El metal amarillo ha caído alrededor de $ 250 por onza desde el comienzo del año, o alrededor del 10%. La última vez que cerró el oro superó los $ 1,300 a mediados de junio y se estableció el viernes en alrededor de $ 1,192, un nivel visto por última vez en enero de 2017.
En los últimos días, los problemas de deuda en Turquía, que acumularon deuda externa en monedas extranjeras, han demostrado el impacto que tiene un dólar fuerte en las economías emergentes. Turquía financió su larga trayectoria de crecimiento económico mediante préstamos en dólares y otras monedas extranjeras. Ahora que el dólar está ganando fuerza, es más costoso para Turquía pagar los préstamos.
Generalizando a partir de la experiencia actual de Turquía, el dólar estadounidense tiende a consolidarse como una opción de refugio seguro cuando hay malas noticias sobre el comercio. Y ha habido mucho de eso dando vueltas en los últimos meses.
Las acciones se han estado moviendo principalmente en la dirección opuesta al dólar, con los precios de las acciones subiendo cuando el dólar está débil y cayendo cuando el dólar es fuerte.
Para el oro, eso significa la competencia del dólar como un refugio seguro para los inversores cuando los precios de las acciones están cayendo. El problema del metal amarillo en el mercado actual parece ser que las reacciones casi instantáneas al movimiento de los precios de las acciones han hecho que el dólar sea una mejor opción como estacionamiento de corto plazo.
El destino de los precios del oro, entonces, puede depender de lo que suceda con todas las negociaciones comerciales en las que actualmente participa la administración Trump. El presidente desearía lograr un acuerdo comercial que sea ampliamente reconocido como una victoria a tiempo para afectar las elecciones de noviembre . Si eso sucede, es probable que las acciones cíclicas experimenten un impulso y las acciones defensivas (y los refugios seguros) vuelvan a caer en desgracia.
Si no se llega a un acuerdo comercial de este tipo, los mercados se mantendrán en la misma forma en la que se encuentran hoy en día. El oro no parece estar bien posicionado para ganar en ninguno de los casos.
