Si no se controla, la inteligencia artificial puede difundir información errónea y permitir que los atacantes cometan nuevos delitos. La ciberseguridad necesita una actualización.
El mes pasado, una importante falla en los sistemas informáticos relacionada con una actualización del software de CrowdStrike afectó a aeropuertos, bancos, hospitales y otras empresas de todo el mundo. La inteligencia artificial podría provocar otra falla sistemática.