Disa, primer accionista de Sacyr tras sindicar su participación con la de la firma canaria Satocán, va a acudir al mercado de bonos para reforzar sus recursos propios. La empresa llevará la emisión a una junta extraordinaria, fijada para el 22 de julio, en plena escalada en el capital de Sacyr. Ayer trascendió que Demetrio Carceller y Juan Abelló han impugnado el nombramiento de dos dominicales en Sacyr en representación de Luis del Rivero y Manuel Manrique.
Leña al fuego en el enfrentamiento entre algunos accionistas significativos de Sacyr y la cúpula directiva de esta última. Uno de los partícipes díscolos, Disa Corporación Petrolífera, tiene previsto captar capital a travíés de una emisión de bonos y lo hará, como telón de fondo, con el reciente ascenso en el capital de Sacyr, que le ha llevado hasta el 13%, y resonando aún la negativa del presidente de Disa, Demetrio Carceller, al refuerzo en el consejo de la constructora tanto del presidente Luis del Rivero como del consejero delegado Manuel Manrique.
Disa ha eludido hacer comentarios sobre la operación, por lo que se desconoce el volumen de la colocación a la que se dará luz verde en una junta extraordinaria de accionistas que tendrá lugar el próximo 22 de julio. Fuentes del mercado apuntan a una emisión inminente por encima de los 150 millones. Tambiíén se mantiene en secreto el destino de los fondos, aunque en foros financieras creen que Disa busca llegar al 20% de Sacyr. El 7% que le resta para conquistar esa cota, que sería adquirido en Bolsa, cuesta 187 millones.
El pasado 28 de febrero Disa vendió el 10% que mantenía en CLH a un grupo de fondos cuyos gestores están asesorados por Axa Private Equity. El valor de la operación ascendió a 360 millones y la desinversión se enmarcó en un plan de reorganización de la cartera financiera, con la mejora de la posición de deuda y la disponibilidad de caja para afrontar inversiones orgánicas. Posteriormente, Disa compró las cuatro estaciones de servicio de BP en Ceuta y tambiíén se hizo con un 2,9% de Sacyr, valorado entonces en 99 millones.
Nueva fuente de financiación
El camino que va a tomar Disa con la emisión de deuda es idíéntico al que ya recorren decenas de empresas, especialmente las cotizadas, al complicarse el acceso a críéditos bancarios. Al cierre de 2009, último ejercicio depositado por Disa ante el Registro Mercantil, la compañía carecía de bonos en circulación y su deuda financiera a largo plazo era de 458 millones, por otros 251 millones que vencían a corto. Conquistar el 20% de Sacyr daría a la firma canaria derecho a un cuarto sillón en el consejo -tiene tres despuíés de sindicar su participación con el 2,8% en manos de Satocán- y enconaría la lucha con el bloque de ingenieros que lideran los fundadores Luis del Rivero (13% del capital), Manuel Manrique (6,1%) y Josíé M. Loureda (12,7%).
En la junta de Sacyr, el 19 de mayo, Carceller y Juan Abelló (9,6% de Sacyr) unieron fuerzas contra la designación de nuevos dominicales. En este sentido, ayer se conoció que los dos accionistas han presentado una demanda de impugnación contra el consejo de administración de Sacyr en el que se nombraron dos nuevos consejeros en representación de su presidente, Luis del Rivero, y su consejero delegado, Manuel Manrique.
Reducción de capital como retribución
La convocatoria de la junta extraordinaria de Disa Corporación Petrolífera se decidió en el consejo de administración del pasado 13 de junio, el mismo día en que tuvo lugar una junta general ordinaria absolutamente de trámite.
Además de una emisión de bonos que se antoja inminente, la distribuidora de productos petrolíferos lleva en el orden del día una reducción de capital mediante la devolución de aportaciones a los socios (el capital social era de 42 millones a la conclusión de 2009). El motivo de este paso no ha sido argumentado, pero se entiende como un modo de remunerar a las familias, encabezadas por la de Carceller, que se reparten el capital de Disa.
A falta de datos sobre el último cierre, la firma canaria concluyó 2009 con un beneficio neto atribuible de 19 millones tras ver caer su cifra de negocio en un notable 39%, hasta los 1.700 millones de euros.
Para el ejercicio 2010, la compañía de distribución de productos petrolíferos de automoción e industrial, que preside Demetrio Carceller, decía no tener grandes expectativas a la vista del esperado estancamiento en el consumo de combustibles.
Las cifras
187 millones es lo que cuesta en el mercado el 7% que separa a Disa del 20% de Sacyr.
360 millones es lo que obtuvo Disa con la venta del 10% de CLH en febrero.