El Gobierno venezolano ha devaluado su moneda (el bolívar) un 31,7% frente al dólar para combatir el "brote inflacionario y especulativo" del país. Telefónica, BBVA, Repsol, Mapfre y otras cotizadas españolas se verán afectadas.
La inflación fuera de control ha provocado que el Gobierno venezolano haya devaluado el bolívar un 31,7%. A partir del miíércoles 13 de febrero, el cambio pasará de 4,3 a 6,3 bolívares por dólar. El ministro de Finanzas, Jorge Giordani, y el presidente del Banco Central de Venezuela (BCV), Nelson Merentes, fueron los encargados de anunciar en rueda de prensa las medidas que, según dijeron, son un mandato directo del presidente Hugo Chávez hospitalizado en La Habana desde hace dos meses.
Como explica el diario El País, la medida supone un nuevo golpe para las empresas españolas con inversiones en el país, sobre todo para Telefónica y el BBVA. El BBVA tiene 5.384 empleados en Venezuela. Controla un 55,6% del Banco Provincial, con unos activos equivalentes a 19.976 millones de euros y un valor neto en libros de 494 millones de euros a cierre de 2012. Su resultado fue de 732,8 millones de euros, con un crecimiento del 51,4%.
En cuanto a Telefónica, los ingresos en los primeros nueve meses de 2012 ascendieron a 2.305 millones de euros, con un crecimiento del 26,9%. El resultado operativo fue de 1.021 millones de euros (+25,6%). La compañía gestiona en el país 11,1 millones de líneas, en su inmensa mayoría de móvil. La anterior devaluación del 50% en 2010 provocó una fuerte caída de Telefónica en Bolsa. El impacto en los activos netos fue entonces de 1.810 millones de euros. A cierre de 2011, Telefónica tenía pendiente de autorización la repatriación de dividendos por 5.882 millones de bolívares, cifra cuyo equivalente en euros pasa de 1.013 a 691 millones de euros con la devaluación, añade El País.
Mapfre, por su parte, ingresó unas primas de 818,7 millones de euros en 2012, con un crecimiento del 27,9%. Sus resultados se duplicaron hasta 45,4 millones de euros.
El País publica que Repsol desarrolla fuertes inversiones en el país y tiene operaciones de exploración y producción. Como la moneda operativa de los ingresos del negocio del petróleo es el dólar y los gastos son en moneda local, el impacto es poco relevante. Iberdrola tampoco resultará afectada apenas por la devaluación, ya que suscribió sus contratos en el país en su mayor parte en dólares (70%) y con garantías para el resto, según explicó la elíéctrica a principios de 2010, cuando se produjo la anterior devaluación del bolívar. El principal proyecto en el país, de Iberdrola Ingeniería, es el ciclo combinado de Cumaná, en el Estado de Sucre, de 1.000 megavatios (MW) y con una inversión asociada de 2.000 millones de dólares (1.375 millones de euros), en consorcio con Elecnor.
Hesperia (con hoteles gestionados por NH), Meliá, Sanitas, Santillana (filial del grupo PRISA, editor de El País y Cinco Días), Mondragón, Atento, Indra, Cirsa o Inditex (a travíés de franquicias) son otras de las compañías españolas presentes en el mercado venezolano, aunque con inversiones de menor tamaño.