Mapfre ha iniciado la venta de su participación en Bankia con el objetivo de minimizar las píérdidas lo máximo posible. La aseguradora, principal socia de la entidad, se ha desprendido de un 1,3% del capital en los últimos meses, sin esperar a la operación acordeón que sufrirá el grupo nacionalizado para que los accionistas pierdan la práctica totalidad de la inversión y, así, participen en el plan de recapitalización que incluye ayudas públicas de 18.000 millones.
Mapfre fue el mayor inversor de Bankia en su salida a bolsa. Contribuyó con 280 millones y se hizo con el 4,3%. En los últimos dos años ha ajustado su valor en libros, provisionando la participación en su gran parte. Tras las dotaciones de 142 millones del ejercicio pasado, ajustó la valoración contable a 0,39 euros por acción; es decir, 11,5 millones de euros.
Este precio es superior a la cotización a día de hoy de la entidad que preside Josíé Ignacio Goirigolzarri. El viernes cerró a 0,29 euros despuíés de caer más de un 7%. Tambiíén será superior a la previsible capitalización en bolsa una vez se efectúe en marzo la operación acordeón, por la que el nominal de cada título disminuya drásticamente de los 2 euros actuales. Tras este proceso, los analistas estiman que la cotización de las acciones podría situarse en torno a los 0,10 o 0,15 euros.
Mala inversión
El presidente de la aseguradora mostró su malestar con la evolución de Bankia. "Nunca se puede estar contento con una inversión que tienes que deteriorar de esta manera", aseguró Antonio Huertas a principios de febrero.
La entidad y Mapfre son socios históricos, principalmente en el área de bancaseguros. La alianza se está reevaluando. Según fuentes del sector, Mapfre aspira a ampliar las relaciones y hacerse con el negocio dejado por Aviva tras romper su alianza con Bankia. Esta ruptura ha supuesto un desembolso de la entidad de 609 millones para evitar el laudo arbitral, por el que la aseguradora reclamaba más de 900.
El pacto histórico entre Bankia -procedente de Caja Madrid- y Mapfre cuenta tambiíén con el crece de participaciones. Por ello, la entidad mantiene a día de hoy el 15% de la compañía que preside Huertas. La Comisión Europea obliga al grupo financiero a desprenderse de este activo, como el resto de su resto industrial, por las ayudas reclamadas al Estado.
La situación de Mapfre con las acciones de Bankia difiere de la de otras empresas y grandes fortunas que inviertieron dinero en la salida a bolsa por cuestiones de Estado en 2011. En esta operación participaron, entre otros, los principales bancos y otras aseguradoras, como Mutua Madrileña. Estos, en su gran medida, desinvirtieron las acciones compradas pocos meses despuíés.
