El acuerdo, adelantado por el Wall Street Journal, supone la primera gran sanción a una de las agencias de calificación por la crisis de 2008.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos y la agencia de calificación crediticia Standard & Poor's están a punto de cerrar una sanción de 1.370 millones de dólares por inflar la calidad de los activos hipotecarios que dieron lugar a la crisis financiera de 2008, adelantó este miíércoles el 'Wall Street Journal' (WSJ).
Aunque el acuerdo todavía debe ser completado, la multa a Standard & Poor's incluiría 637 millones de dólares destinados al Departamento de Justicia, más 100 millones al estado de California, mientras que otra docena de estados de Estados Unidos tambiíén recibirían compensación, de acuerdo con el WSJ, que cita fuentes de las negociaciones.
La cifra sería algo menor que lo solicitado en un principio por la Justicia estadounidense, que había pedido en compensaciones solo para ese departamento 1.000 millones de dólares. En 2013, el Gobierno estadounidense presentó una demanda civil contra S&P por haber engañado conscientemente a los inversores sobre la calidad crediticia de los activos hipotecarios en los años previos al estallido de la burbuja financiera en 2008.
Se trata de la primera gran sanción a una de las agencias de calificación por la crisis de 2008, ya que, hasta ahora, las multas se habían concentrado en los grandes bancos de Wall Street. S&P, junto a sus principales rivales Moody's y Fitch's, se reparten casi el 95 % del mercado de calificación crediticia mundial, por lo que jugaron un papel fundamental a la hora de garantizar la calidad financiera de unos activos que luego se probó apenas tenían valor.