Por... Paul Ausick
A medida que el huracán Irma atravesó el Caribe durante los últimos dos días, la destrucción que dejó en su estela en varias islas pequeñas y relativamente pobres fue casi total. El camino de la tormenta lo tomó directamente sobre la isla de San Martín, donde el presidente Trump posee una finca de cinco acres conocida como Château des Palmiers.
Trump había enumerado la propiedad para la venta de nuevo en mayo a un precio no revelado. Cuando compró la finca en 2013, el precio de cotización fue de $ 19.7 millones, pero el precio real que pagó no ha sido revelado. El precio de cotización en mayo fue de 28 millones de dólares, pero el Washington Post informó en agosto que Trump había bajado el precio de la finca a 16,9 millones de dólares.
El empresario británico Richard Branson, propietario de una finca en la cercana isla Necker, se refugió en la bodega de cemento de su casa, que también fue destruida por la tormenta.
El complejo de Mar-a-Lago de Trump al norte de Miami fue ordenado evacuado el viernes por la mañana, junto con otras propiedades en las islas de barrera y partes bajas del condado de Palm Beach, en preparación para el pronóstico de la tormenta.
La isla de Barbuda fue la primera en ser golpeada por Irma y supuestamente se ha vuelto "prácticamente inhabitable" según el primer ministro Gaston Browne. Sorprendentemente, sólo una muerte - un niño pequeño - se informó de entre las 1.700 personas de la isla.
Hasta el jueves, Irma ha sido acusada de un total de decenas de muertes, incluyendo cuatro en San Martín, tres en Puerto Rico y una en el territorio británico de Anguila.
