Vehículos eléctricos
Trump ha prometido repetidamente poner fin a un conjunto de políticas federales que incentivan las ventas de vehículos eléctricos, y su victoria crea una oportunidad para realizar cambios desde el primer día.
Uno de los principales objetivos es una regulación de la Agencia de Protección Ambiental que limita la contaminación de los tubos de escape de los automóviles y las camionetas ligeras, que tiene mandatos tan estrictos que obligan a los fabricantes de automóviles a vender muchos más modelos eléctricos e híbridos enchufables con el tiempo.
Ex asesores de Trump y cabilderos de la energía ya han redactado un texto que podría incluirse en una orden ejecutiva que ordene a la EPA revisar la norma. Se está desarrollando un esfuerzo similar para ir tras las exenciones de la Ley de Aire Limpio que efectivamente dan luz verde a las estrictas normas de contaminación de los automóviles de California.
Energía eólica marina
Trump no ha explicado exactamente cómo abordará la naciente industria eólica marina, mientras los desarrolladores trabajan para instalar turbinas en parques eólicos multimillonarios a lo largo de la costa este de Estados Unidos.
Pero Trump ha criticado implacablemente los posibles impactos sobre las aves y las ballenas, y aprovechó un mitin en Nueva Jersey a principios de este año para prometer que se tomarán medidas "desde el primer día" contra la industria.
Eso podría tomar la forma de ordenar al Departamento del Interior que suspenda la concesión de nuevos proyectos o la venta de nuevas concesiones de energía eólica marina. Esa moratoria podría imponerse administrativamente y sería difícil de impugnar en los tribunales.