'Una alarmante escalada del riesgo climático'
Por Jennifer A. Dlouhy
La elección de Donald Trump —y su promesa de volver a retirarse de la diplomacia climática internacional— plantea una amenaza decisiva a la lucha contra el calentamiento global, ya que se cierra la ventana para una acción significativa.
La victoria de Trump se produce apenas unos días antes de que representantes de casi 200 naciones se reúnan en Azerbaiyán para la COP29, la cumbre climática anual de las Naciones Unidas. Esa reunión de dos semanas comenzará el lunes a la sombra de un presidente electo republicano que ha prometido liderar otra retirada del histórico Acuerdo de París de 2015 .
Un nuevo éxodo de la mayor economía del mundo y el segundo mayor emisor, que repita una medida adoptada durante el primer mandato de Trump, podría tener repercusiones más duraderas esta vez.
Trump está ahora en posición de socavar la ya erosionada confianza en la cooperación climática que ha dado forma a la última década. Su regreso promete desestabilizar la delicada diplomacia que ha galvanizado los esfuerzos mundiales para reducir la contaminación que calienta el planeta y desplegar energía de cero emisiones.
Sin el compromiso estadounidense, los esfuerzos para reducir las emisiones podrían estancarse en la próxima década, que se considera crucial para mantener bajo control el aumento de las temperaturas de la Tierra.