En mitad del vendaval de esta crisis, el presupuesto de la UE parece uno de los pocos al abrigo de los recortes, lo que ha desatado un año más una batalla en Bruselas. Y eso que el bote común que comparten los 27 países del club y gestiona la Comisión Europea tiene un margen mínimo de modificación anual, por cuanto los jefes de Estado y de Gobierno del Viejo Continente fijan cada siete años su dotación, sus grandes líneas, y el reparto del generoso maná de los fondos europeos.
La batalla de este año la ha provocado el polaco Janusz Lewandowski, comisario europeo de Programación Financiera y Presupuesto. El pasado 27 de abril propuso un incremento del 4,9% del presupuesto comunitario para 2011, en comparación con el de 2010. Un presupuesto total de 142.600 millones de euros.
¿Cuáles son sus argumentos?
Sus argumentos: si en medio de la crisis y de los recortes en el gasto público a los que se ven obligados países como Grecia, Francia, Italia, España, Portugal o Reino Unido, Bruselas tambiíén deja de inyectar a la economía fondos para las regiones, para el empleo, para la agricultura, para la investigación y el desarrollo, etcíétera, el crecimiento no tendrá dónde apoyarse.
Su tesis ha recibido el apoyo de, entre otros, Eurochambres, el lobby que representa ante las instituciones comunitarias los intereses de las cámaras de comercio de 45 países europeos, y que se presenta como la voz de 20 millones de empresas, de las que el 93 por ciento son pymes.
Broncas al comisario de presupuestos
Pero el comisario de presupuesto se ha llevado dos broncas. La del Parlamento Europeo, por proponer una subida escasa; y la de los 27 Gobiernos nacionales de la UE, por no ajustarse el cinturón como ellos están supuestamente haciendo.
El debate se ha envenenado porque una de las alzas mayores es en los gastos administrativos: un 4,5%. Los Veintisiete ya intentaron el año pasado recortar los elevados sueldos de los eurofuncionarios, pero se tuvieron que conformar con reducir la subida al 1,8%. Los sueldos están en los tribunales y es posible que la subida abortada del 3,7% termine aplicándose con efecto retroactivo. Para 2011, la subida salarial prevista ronda el 2%.
