Ha llegado el día. El inquilino número 35 del Ibex comienza su andadura en el selectivo español. El camino de Jazztel hasta este punto no ha sido fácil. Atrás quedan batallas legales con Telefónica por hacerse un hueco y superar las barreras de entrada al sector, problemas financieros y dudas sobre un negocio que, a la postre, ha conseguido salir delante de la mano de Leopoldo Fernández Pujals. Hoy, ya en el mayor escaparate de la bolsa española, el del Ibex 35, surge la incógnita de si la presión de los focos beneficiará a la compañía o, por el contrario, actuará como un lastre para su cotización.
Los analistas no pueden estar más divididos a la hora de valorar las perspectivas a corto plazo de un valor que no deja indiferente a nadie. Mientras unos aprecian que los fundamentales de la compañía pueden conducirle a una revalorización a un año vista de entre un 10% y un 40% desde los niveles actuales, otros son bastante más escíépticos y no terminan de confiar en el plan de negocio presentado por la firma con vistas a 2017.
Alberto Roldán, director de inversiones de Lloyd’s Bank, considera que “Jazztel es un valor que despierta muchas dudas en un momento en el que el mercado necesita encontrar una dirección. El problema, básicamente, es que no presenta nada nuevo. En su día ofrecía un producto a bajo coste, pero ahora la gran mayoría de operadores ha hecho un reajuste de sus precios y ya no resulta competitivoâ€.
La guerra abierta entre las operadoras por ofrecer más por menos y asaltar el al mercado low cost ha sido una tónica dominante en los últimos meses. Este lunes, Telefónica ha dado una nueva vuelta de tuerca al mercado presentando su Movistar Fusión Cero, un producto que combina línea de telíéfono fijo, ADSL de 10 megas y una línea móvil para hablar y navegar por 35 euros mensuales. En opinión de los expertos, este puede ser el principal hándicap para Jazztel en un momento en el que el ajuste de precios impera en el negocio.
Roldán va incluso más allá y critica el programa de inversiones en instalación de fibra óptica acometido por la firma en un país “que no deja de estar en plena recesiónâ€. Respecto a su entrada en el Ibex, considera que “propiciará una mayor cobertura por parte de los analistas, un grado de presión extra y unas mayores expectativas que, de no cumplirse, acabarán pasando factura a la compañía, motivos por los que nos mantenemos neutralesâ€.
Una radiografía radicalmente distinta es la que aprecia Javier Barrio, analista de BPI (Banco Portuguíés de Investimento), al apuntar que Jazztel forma parte de la lista Top Buy (compra preferente) de pequeños y medianos valores del mercado español y portuguíés. Barrio aprecia en el valor un crecimiento significativo y un cambio de percepción en el mercado respecto a la compañía, fundamentado en un precio que, “a pesar de las últimas ofertas lanzadas por sus competidores, sigue siendo muy competitivoâ€.
"La entrada en el Ibex es relevante de cara a su imagen corporativa y bien es cierto que las compañías del selectivo tienen su influencia en fondos indexados al índice. Sin embargo, el poco peso que va a tener dentro del indicador hace que tengan más influencia los factores que lo han llevado hasta ahí. Eso esconde detrás una historia de íéxito que no tiene por quíé cambiar ahora", añade Barrio.
Ibex no es sinónimo de íéxito
Entrar en el selectivo español no se traduce, ni mucho menos, en un camino más despejado por delante. Viscofan puede dar buena fe de ello. El valor se encuentra en el Ibex 35 desde el primer día de enero y desde entonces no ha conocido otra cosa que los números rojos. En lo que va de año se deja un 7,6%, muy lejos de las ganancias de un 49% que registró en el mercado continuo durante 2012. El caso contrario es Gamesa, que salió del selectivo por la firma navarra. Despuíés de cerrar el pasado ejercicio con una caída del 49%, este año lidera las ganancias del Mercado Continuo al apuntarse un 62%.
Los expertos tampoco estiman que en las próximas jornadas se vayan a apreciar subidas significativas dentro de Jazztel por comenzar a andar en el Ibex. "El mercado lo da por descontado y no será un catalizador en el corto plazo", apunta Roldán. Desde mediados de abril, la compañía ha recibido dos recomendaciones de sobreponderar por parte de Barclays y Bankia, que han elevado su precio objetivo a un año hasta 7 y 6,8 euros, respectivamente, y una de compra de Banco Santander hasta los 6,45 euros. Frente a ellas contrasta el consejo de JP Morgan, que se mantiene en una posición neutral frente al valor y rebaja su precio a 5,5 euros