(AP)
Los accionistas de US Airways sometieron a votación el viernes la aprobación de un proyecto de fusión de esa empresa con American Airlines, uno de los pasos finales en el acuerdo para crear la mayor aerolínea del mundo.
Según el director general de US Airways, Doug Parker, se cuenta con los suficientes accionistas a favor de la unión para garantizar su aprobación. El margen no estuvo disponible de inmediato.
Los propietarios de acciones de US Airways Group Inc. recibirían el 28% de las acciones de la compañía consolidada y el resto irá a los acreedores, empleados y accionistas de AMR Corp., la matriz de American Airlines.
El acuerdo está siendo analizado por los reguladores antimonopolios del Departamento de Justicia de Estados Unidos. Los críticos de la fusión temen que la empresa consolidada reduzca la competencia y aumente los precios de las tarifas aíéreas.
La preocupación por una menor competencia y tarifas más altas tambiíén acompañó las fusiones de Delta y Northwest en 2008, United y Continental en 2010, y Southwest y AirTran en 2011. Los reguladores antimonopolio las autorizaron todas.
Esas fusiones cambiaron el panorama de las aerolíneas, pues crearon gigantes que hicieron difícil que US Airways y American pudiesen competir, dijo Parker.
La fusión “crea un cuarto competidor fuerte para United, Delta y Southwestâ€, agregó Parker, quien será el director general de la compañía combinada, que mantendrá el nombre de American Airlines y tendrá sus oficinas corporativas en Texas.
Si el acuerdo American-US Airways avanza, cuatro aerolíneas controlarán más del 80% del mercado de viajes aíéreos nacionales en Estados Unidos.
El Departamento de Justicia podría tratar que American y US Airways cedan algunos espacios de despegue y aterrizaje en el Aeropuerto Nacional Reagan, en las afueras Washington DC.
Parker pronosticó que los reguladores aprobarán la fusión al afirmar: “No vemos ninguna razón†por la que American y US Airways sean obligados a renunciar a los espacios en el aeropuerto Reagan.
Alrededor de 50 trabajadores del Sindicato Internacional de Empleados de Servicio protestaban frente al edificio donde se celebraba la reunión de US Airways, exigiendo mejores salarios para los trabajadores aeroportuarios.