La Bolsa y rupia indias vuelven a sufrir fuertes caídas tras el viernes negro
Nueva Delhi, 19 ago (EFECOM).- La Bolsa sufrió hoy otra fuerte caída en la India (1,56 %) y la divisa nacional alcanzó un nuevo mínimo en el regreso de la actividad a los mercados de valores despuíés de que el pasado viernes se registraran bajones históricos.
El Sensex-30, índice de referencia de la plaza bursátil de Bombay, capital financiera del país asiático, llegó a perder casi 500 puntos durante la jornada, aunque finalmente cerró en 18.307, una bajada de 290,6 unidades respecto a la apertura.
El viernes, el selectivo había sufrido un bajón de casi el 4 % -la peor caída desde mediados de 2009- empujado por la acentuada depreciación que está experimentando la rupia frente al dólar y el pesimismo y desconfianza que se han instaurado entre los inversores.
La moneda nacional alcanzó hoy de hecho un nuevo mínimo histórico a media tarde, hora local, cuando llegó a cambiarse a cerca de 63 unidades por billete verde (62,96), pulverizando la barrera de 62 que había sobrepasado hace solo tres días.
La rupia ha cosechado continuos mínimos históricos en las últimas semanas debido principalmente al endurecimiento de la política monetaria por parte de EEUU y a una serie de factores internos.
Desde principios de mayo, la moneda india se ha devaluado más de un 18 % respecto al dólar.
El Gobierno indio y el Banco de la Reserva (central) anunciaron la semana pasada un paquete de medidas para contener la caída, entre las que figuran restricciones y aranceles a la importación de oro, y a las inversiones de ciudadanos indios en el exterior.
Estas medidas se suman a otras adoptadas por las autoridades previamente como la liberalización de algunos sectores de la economía para intentar atraer capital foráneo.
Sin embargo, los analistas son pesimistas ante la efectividad de estas iniciativas y creen que el país asiático -con pocas reservas de divisa extranjera y un alto díéficit por cuenta corriente- se halla en una situación vulnerable que podría afectar mucho al crecimiento económico.
La celebración de elecciones generales dentro de un año, con un escenario abierto y muy incierto, contribuye -según los observadores- a aumentar la desconfianza interna y externa hacia la economía india y a la aplicación de algunas medidas liberalizadoras aprobadas.
Tras la díécada más próspera de su historia en cuanto a rendimiento del PIB -con subidas cercanas a los dos dígitos- la India sufrió en los dos últimos años fiscales una notable desaceleración.
En el curso 2012-13 el país creció solo un 5 % y la última medición del Banco de la Reserva (central) pronostica que en el presente ejercicio el aumento será de un 5,5 %, un dato ya muy moderado cuando apenas se ha cumplido el primer cuatrimestre.