Gerard Piquíé se desmarca este martes con unas sorprendentes declaraciones en la prensa italiana. El jugador azulgrana asegura, en una entrevista concedida a 'Extra Time' -suplemento de la 'Gazzetta dello Sport'-, que "el Barcelona era esclavo del tiqui-taca".
"Llevábamos unos años con entrenadores de la casa, antes Pep y despuíés Tito, y exageramos nuestro estilo de juego quizás hasta el punto de que fuimos un poco esclavos", considera Piquíé. "Ahora ha llegado el Tata de fuera, que tambiíén tiene la misma visión del fútbol, de mantener la pelota, pero tambiíén cuenta con otras opciones. Y eso es algo muy positivo en el sentido de que tenemos variantes", añade.
"En el fútbol hay que mejorar cada año"
"Si nos están apretando, tirar dos balones largos no es malo, es cambiar el juego, es oxigenar. En el fútbol hay que mejorar cada año, desarrollar, porque al final la gente te conoce", matiza.