La mañana empieza con buenas noticias para los mercados. En el de renta variable, el Ibex, tras la fuerte subida de ayer, casi un 2%, quedó en los 8.800 puntos. Una apertura alcista lo llevaría a máximos del año, si bien los futuros europeos cotizan planos.
En el mercado de deuda la prima de riesgo española ha marcado su primer cambio del día en 249 puntos básicos, muy cerca del nivel más bajo desde julio de 2011, gracias a la mejora del bono español pero, sobre todo, a la subida de rentabilidad del alemán.
Dos aspectos están detrás de esta mejora del mercado. En primer lugar, el nuevo retraso y las dudas sobre el ataque a Siria, reflejadas especialmente en un precio del petróleo que ha perdido cinco dólares sobre el cierre del viernes. En todo caso, el origen último de esta mejora está, paradójicamente, en el mal dato de empleo de Estados Unidos del viernes pasado, que ha ahuyentado los miedos del mercado a la retirada de estímulos por parte de la Fed ante la reunión de dentro de dos semanas.
Otro de los aspectos que tiran es China. Pekín sigue dando buenos datos económicos, si bien esta madrugada el Hang Seng ha cerrado con ligeras píérdidas y el Nikkei ha ganado otro 0,5%, y está ya en máximos de casi dos meses.
