Por... BREE FOWLER y PAUL WEBER
Los accionistas de Dell Inc. aprobaron el jueves una oferta de compra por 24.800 millones de dólares hecha por el fundador de la compañía, con lo que pondría fin a su historia de 25 años como empresa en la bolsa de valores e intentaría idear una recuperación fuera de la supervisión de Wall Street.
Al tíérmino de una reunión de accionistas, funcionarios de Dell dijeron que según los cálculos preliminares, hay votos suficientes a favor de la propuesta de compra de su director general Michael Dell. La empresa no anunció la cifra total de votos.
"Es un gran resultado para nuestros clientes y nuestra empresa", dijo Michael Dell en una conferencia telefónica con los inversionistas.
Al igual que otros fabricantes de PCs, Dell Inc. ha sido castigada en los últimos años mientras los consumidores cambiar sus hábitos de compra de las tradicionales computadoras personales a tabletas, telíéfonos inteligentes y otros dispositivos móviles.
Michael Dell dijo que la compra es el primer paso en una transformación de varios años que devolverá a Dell Inc. a sus raíces y se centrará en el "espíritu empresarial" con el que fue fundada la empresa.
Dell comenzó a vender computadoras desde su dormitorio durante su primer año como estudiante en la Universidad de Texas. Cuatro años despuíés su empresa pasó a ser cotizada en la bolsa.
Como empresa privada, Dell tendrá la flexibilidad que necesita para realizar las inversiones necesarias sin las limitaciones y escrutinio de una empresa pública, agregó.
El mes pasado, Dell dijo que sus beneficios bajaron un 77% en su último trimestre fiscal, al reducir precios la empresa para compensar la contracción de sus ventas. Las acciones de Dell han bajado más del 40% desde que Michael Dell regresó para un segundo periodo como director general en 2007. En la contratación de la tarde las acciones de Dell no variaban, a 13,85 dólares.
Michael Dell, que formuló su oferta con el grupo inversionista Silver Lake Partners, reconoció que la reforma seguramente reducirá sus beneficios por otros dos años, por lo que será más fácil lograrla sin la atención de Wall Street, obsesionada con los resultados a corto plazo.