El 30% de los españoles apuesta por abandonar la zona euro y volver a usar la peseta como moneda nacional, frente a un 32% que mantendría la moneda única a pesar de considerarla tambiíén negativa para la economía, según se desprende del duodíécimo estudio anual de Transatlantic Trends llevado a cabo por el German Marshall Fund de Estados Unidos en colaboración con la Fundación BBVA y otras fundaciones europeas.
Los españoles son los europeos que más apuestan por la vuelta a la antigua moneda nacional con un 30% a favor del regreso de la peseta, por delante de países como Francia y Portugal, en los que un 27% abandonarían el euro, o Alemania, Italia y Países Bajos, en los que un 25%, 24% y 22% demandan la vuelta de la moneda local, respectivamente.
Esto es consecuencia, según la encuesta, de un aumento en la valoración negativa del uso del euro en la economía, que en el caso de España ha pasado del 54% en 2011 al 63% de este año, por encima de la media europea que este año alcanza el 60% de valoración negativa entre los encuestados. Una valoración más negativa que la de los españoles la manifiestan Reino Unido, con un 86%, Suecia, con un 81%, Portugal, con un 65%, y Polonia y Francia, ambas con un 64%.
Asimismo, se observa una evolución "significativamente desfavorable" de la imagen de la Unión Europea entre los españoles, que ha disminuido de forma sostenida, pasando de 83% de opinión favorable en 2010, al 59% en 2013.
En este sentido, la opinión de que la pertenencia a la UE ha sido positiva para la economía de España ha pasado del 68% en 2011 al actual 49%. Tambiíén aumenta el rechazo a delegar mayor autoridad a la UE en lo que respecta a política económica y presupuestaria nacional, al tiempo que se incrementa el apoyo a que cada estado miembro sea el que defina dicha política, preferencia que en España ha aumentado del 56% en 2012 a 75% en 2013.
El estudio remarca que España se encuentra en el grupo de los países que más se sienten afectados por la crisis económica, con un 82% de los españoles que se sienten "muy o bastante afectados", frente al 65% del promedio europeo. Por otro lado, tan solo el 18% aprueban la gestión económica del Gobierno de España, mientras que la media europea de aprobación de sus gobiernos se sitúa en el 34%.
En el ámbito europeo, los españoles son tambiíén quienes más negativamente valoran la gestión de la UE de la crisis económica, con tan solo un 21% de aprobación frente al 43% en el promedio europeo. En el caso de la valoración de la canciller alemana, Angela Merkel, su gestión es aprobada por el 15% de los españoles, mientras que en Europa este porcentaje alcanza el 47% de media.
Preguntados por una posible reducción del gasto del Gobierno para recortar la deuda, un 42% de los españoles se muestra a favor, un 35% lo mantendría y un 28% apostaría por aumentarlo. Esta apuesta por la reducción de deuda se hace especialmente palpable en el caso del gasto en defensa; los españoles están, con un 56%, a la cabeza de Europa en cuanto a reducción del gasto en esta materia.
Por contra, tan solo un 2% se muestra a favor de la reducción de la inversión en ciencia y tecnología, un 5% en programas del estado de bienestar y un 17% en transportes en infraestructuras, frente a la media europea que se sitúa en un 5%, 15% y 13%, respectivamente.