Eulen se valora en casi 253 millones de euros. Así se desprende de una operación interna de compra de acciones realizada en septiembre de 2012.
Entonces, la sociedad dominante del grupo (Eulen SA) adquirió 10.844 acciones, el equivalente al 2,14% del capital social de la compañía, a uno de sus propios accionistas por importe de 500 euros cada acción, a pesar de que en la compañía no existen restricciones para la libre transmisibilidad de íéstas. Según reflejan las cuentas de la compañía depositadas en el Registro Mercantil, el precio de compra de las acciones ha sido determinado en base a la valoración que un tercero independiente ha llevado a cabo mediante el míétodo de descuento de flujos de caja. Una fórmula que se basa en la capacidad de una compañía para generar excedente de caja y que tiene en cuenta el plan de negocio futuro. De esta forma y teniendo en cuenta que, a 31 de diciembre de 2012, el capital social de Eulen estaba representado por 505.908 acciones, el conjunto de la sociedad valdría 252,95 millones de euros.
En 2012, además de la citada adquisición de acciones, la junta extraordinaria de accionistas aprobó el 28 de diciembre una reducción del capital de la sociedad dominante por importe de 1,917 millones, mediante la amortización de 63.825 acciones, el equivalente al total de la autocartera de la empresa. Así, el capital social de Eulen ha quedado establecido en 15,2 millones de euros. Accionista de control Durante el pasado ejercicio, se produjo un cambio accionarial que llevó a la sociedad Daval Control a hacerse con la mayoría del capital social de Grupo Eulen, con 291.237 acciones, el equivalente al 57,57%. Daval Control es una sociedad de responsabilidad limitada constituida por el patriarca de Eulen, David ílvarez, junto con su hija María Josíé ílvarez Mezquíriz, para blindar la compañía frente a los cinco hijos con los que mantiene un enfrentamiento por la gestión del grupo de servicios.
Tal y como explicaron entonces fuentes próximas a Daval Control, la creación de íésta “permite garantizar a David ílvarez que el futuro de la compañía dependerá de lo que íél disponga. Podrían así quedar trastocados los planes de los hijos rebeldes de hacerse, algún día, con el control del grupoâ€. El resto de las acciones se distribuye principalmente entre seis de los siete hijos de David ílvarez. Tras la constitución de Daval Control, Grupo Eulen cambió la administración de la sociedad a dos administradores solidarios, que son el patriarca y su hija María Josíé, como presidente y vicepresidenta de la compañía, respectivamente. Grupo Eulen cerró 2012 con una facturación de 1.338,4 millones de euros. El beneficio neto cayó un 25%, hasta 16 millones.