El Consejo de Ministros aprueba hoy los presupuestos generales del Estado para 2014, que mantendrán congeladas las retribuciones en el sector público y se apoyarán en un crecimiento económico previsto para el próximo año del 0,7 %.
Asimismo se dará luz verde al proyecto de ley reguladora del factor de sostenibilidad y del índice de revalorización del sistema de la Seguridad Social, despuíés de que el Consejo Económico y Social (CES) le haya pedido hoy al Gobierno que no desvincule las pensiones de la subida del IPC.
El Ejecutivo ha descartado que los presupuestos incluyan nuevas medidas fiscales más allá del mantenimiento de la subida temporal del IRPF o las modificaciones en el Impuesto de Sociedades. Por el lado del gasto, ha decidido mantener congeladas las retribuciones de los empleados del sector público por cuarto ejercicio consecutivo, así como la tasa de reposición de personal, salvo excepciones. El Gobierno cuenta con ingresar 128.159 millones de euros y se ha marcado como límite de gasto no financiero 133.259 millones, el 2,7 % más que hace un año.
El proyecto recogerá el esfuerzo en la corrección del díéficit que tiene que hacer el Estado central y que pasa por disminuir el desequilibrio de la administración central del 3,8 % al 3,7 % del PIB y el de la Seguridad Social del 1,4 al 1,1 % del PIB. De las grandes partidas se recortará el gasto disponible de los Ministerios un 0,7 %, hasta 36.042 millones, mientras que se mejoraran las destinadas a investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), becas, cultura o deporte.
Previsiblemente incluirá la revalorización de las pensiones para 2014, que es muy probable que se quede en el 0,25 %, ya que desde el Gobierno se ha advertido de que no hay margen para mucho más. El 0,25 % es la subida mínima que desde el próximo año estará garantizada por la ley de reforma de pensiones que tambiíén será aprobada hoy en el Consejo de Ministros. El proyecto de ley incluye un nuevo índice de revalorización que tendrá en cuenta los ingresos y gastos del sistema, y que establecerá -junto a la subida mínima del 0,25 %- un incremento máximo del IPC más el 0,25 %.
Asimismo, se incorporará el factor de sostenibilidad que se aplicará desde 2019 para adecuar el cálculo de la pensión inicial a la esperanza de vida, que se fijará cada cinco año conforme a las tablas de mortalidad de la Seguridad Social. El Gobierno no cree que desligar la revalorización de las pensiones del IPC vaya a provocar una píérdida de poder adquisitivo significativa para los pensionistas, ya que cuenta con que la inflación se modere gracias a la ley de desindexación de la economía. El anteproyecto de esta ley, que tiene como objetivo desligar precios y rentas públicas de la evolución del IPC, tambiíén será visto hoy en el Consejo.