Abertis ha anunciado esta tarde la venta de los aeropuertos de Belfast Internacional y Estocolmo, así como las concesiones de terminal del aeropuerto de Orlando Sanford y todo el negocio de gestión aeroportuaria en Estados que estaba en manos de TBI, la compañía que controla con un 90% del capital y que comparte con Aena, que tiene en 10% restante. El grupo Airports Worldwide Holding ha adquirido lo activos, en una operación valorada en 284 millones de euros.
El paso dado por el grupo de infraestructuras da continuidad a la política de desinversiones en el sector aeroportuario. Está a punto de cerrar la venta de las instalaciones londinenses de Lutton, a Aena y Axa, y ya ha deshecho posiciones en Cardiff y Colombia, a lo que se añade la expropiación de las instalaciones que gestionaba en Bolivia. El grupo pretende llegar un acuerdo de justiprecio con el Gobierno de Evo Morales.
En esa situación, a Abertis solo le queda desprenderse del aeropuerto de Jamaica y su participación en Grupo Aeroportuario del Pacífico, del que controla un 5% del capital a travíés de Aeropuertos Mexicanos del Pacífico, compañía en la que tambiíén figura Aena.