INICIO FOROS ÍNDICES DIVISAS MATERIAS PRIMAS CALENDARIO ECONÓMICO

Autor Tema: El Super Crash: "quiebras bancarias", "desaparición de la FED" y "fin del dólar"  (Leído 1068 veces)

eversor

  • Buena participación
  • ***
  • Mensajes: 164
  • Karma: +0/-0
http://www.libertaddigital.com/economia/el-super-crash-quiebras-bancarias-desaparicion-de-la-fed-y-fin-del-dolar-1276337269/

Tan sólo unos pocos gurús e inversores han logrado anticipar la llegada de la crisis subprime, antes de que íésta tuviera lugar, frente a la mayorí­a de los economistas. Dichos analistas prevíén ahora un oscuro futuro para el sistema financiero internacional. El exitoso inversor Jim Rogers apuesta por la “desaparición de la Reserva Federal (FED)” y el inicio del “fin del dólar” como moneda de referencia internacional. El economista Nouriel Roubini alerta que todo el sistema financiero es “subprime”, y que quebrarán cientos de pequeños bancos y decenas de grandes entidades. Mientras, el ex-economista del FMI Kenneth Rogoff prevíé un largo perí­odo de “estanflación”.

EEUU tiene ya 117 bancos en riesgo de quiebra

    *
      Los bancos de EEUU en riesgo de quiebra ascienden a 117 en el primer trimestre
    *
      El cierre del Columbian Bank & Trust eleva a 9 las quiebras bancarias en EEUU
    *
      Bernanke limitará los rescates de la Fed ante la llegada de nuevas quiebras bancarias


Noticia publicada el 26-08-2008

LD (M. Llamas) ¿A quíé nos enfrentamos? Se trata de una mera crisis coyuntural, cuyo origen radica en la concesión de dinero fácil en forma de críédito a compradores de vivienda insolventes (hipotecas subprime), tal y como se ha mantenido hasta ahora, ¿o va más allá? ¿Crisis sistíémica? Algunos prestigiosos analistas hablan ya sin tapujos de esta posibilidad, en referencia a la quiebra del actual sistema financiero e, incluso, monetario.
 
No es nada nuevo. Un proceso de caracterí­sticas similares tuvo lugar durante los años 30 del pasado siglo, tras el estallido del crack financiero de 1929, en donde el patrón oro fue sustituido por un sistema de arbitraje cambiario dirigido por los reciíén nacidos bancos centrales.
 
La clave del actual problema radica en la reducción artificial de tipos de interíés puesto en marcha por la FED y el Banco Central Europeo (BCE) durante los últimos años, que permitió una elevada expansión del críédito sin contar con el necesario ahorro previo. Así­, las entidades de críédito han seguido una estrategia de alto riesgo, centrada en adquirir deuda a corto plazo (mediante titulización de príéstamos y complejos vehí­culos de deuda crediticia) para sufragar inversiones a largo (hipotecas y distintos productos financieros), aprovechándose de los bajos tipos de interíés, tal y como avanzó LD.
 
Desde el estallido de la crisis subprime, numerosos analistas, incluido el ex presidente de la FED Alan Greenspan, advierten de que asistimos a la peor crisis desde la Gran Depresión. Y si entonces aquel terremoto logró modificar los cimientos de la economí­a internacional, el actual Super Crash (tal y como lo denomina el inversor Peter Schiff) amenaza con provocar un ajuste similar.
 
Causa y origen de la crisis crediticia
 
Al menos, esto es lo que predicen algunos de los nuevos gurús económicos del siglo XXI, tales como el exitoso inversor Jim Rogers, el profesor de Economí­a de la Universidad de Nueva York Nouriel Roubini, o el ex-economista del FMI Kenneth Rogoff.
 
Algunos de estos analistas anticiparon la llegada de las subprime en EEUU el pasado verano, y las posteriores turbulencias financieras que se han desencadenado desde entonces. Por el contrario, los que hasta ahora era considerados como gurús, así­ como los principales organismos internacionales de análisis (Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial, bancos centrales, grupos de estudio, agencias de calificación y todo tipo de gobiernos) han errado constantemente en sus previsiones.
 
De hecho, la mayorí­a de ellos aseguraban el pasado verano que la estabilidad financiera se recuperarí­a, como muy tarde, a finales de 2007. Si los citados expertos siguen acertando en sus previsiones, la economí­a internacional se enfrenta al peor de los escenarios conocidos en el último siglo. De hecho, lo peor está por llegar.
 
Quiebras bancarias en EEUU y la mayor recesión en díécadas
 
“í‰sta será de lejos la peor crisis financiera desde la Gran Depresión”. Roubini estima que la actual crisis provocará unas píérdidas bancarias próximas a los 2 billones de dólares, frente al billón que prevíé el FMI en la actualidad. Es decir, casi el doble.
 
Los impagos se están trasladando desde las hipotecas subprime, a los críéditos de alta calidad (prime) destinados a la compra de vivienda en EEUU, tal y como avanzó LD. De este modo, la morosidad amenaza ya a hipotecas por valor de cientos de miles de millones de dólares; pero además, se trasladará igualmente a diversos tipos de productos crediticios, tales como, príéstamos al consumo, tarjetas de críédito, deuda municipal y bonos comerciales, entre otros.
 
Como resultado, Roubini asegura que cientos de pequeños bancos en EEUU están en riesgo debido a su “elevada exposición al mercado inmobiliario”. De hecho, “docenas de bancos regionales e, incluso, nacionales (como el ya fallido Indy Mac) tambiíén se dirigen hacia la quiebra”. Además, “algunos de las entidades de críédito más grandes del paí­s son, igualmente semi-insolventes”, arrastrados por la crisis que vive el mercado inmobiliario norteamericano.
 
Desplome del mercado inmobiliario
 
“Durante la recesión de principios de los años 90, el precio de la vivienda cayó de media un 5 por ciento con respecto a su valor máximo”. Sin embargo, en la actualidad, los depreciación de los inmuebles se aproxima al 18 por ciento, y amenaza con continuar. “Si una caí­da del 5 por ciento en el precio de la vivienda fue suficiente para convertir en insolvente a Citi en 1991, ¿cuántas entidades se verán afectadas si la depreciación alcanza el 30 por ciento y los impagos masivos se extienden por otro tipo de productos financieros?”, se pregunta Roubini.
 
Durante la recesión de los 90 quebraron casi 1.000 entidades en EEUU. Hoy, algunas instituciones (Fortis) apuntan que caerán 6.000 bancos, de los cerca de  8.500 que operan en el mercado norteamericano. El modelo que impera en la mayorí­a de las entidades de críédito, consistente en “endeudarse a corto e invertir (prestar) a largo no puede sobrevivir” si los bancos carecen de fondos propios suficientes, o sin el apoyo de un  “banco central que actúe como prestamista en última instancia”, advierte el economista.
 
En este sentido, cabe destacar los recientes rumores de quiebra de los gigantes hipotecarios Fanie Mae y Freddie Mac, con las nefastas consecuencias que conllevarí­a su rescate gubernamental, así­ como la caí­da de algún otro banco de gran tamaño en los próximos 6 meses, según prevíén los inversores internacionales.
 
A este respecto, el ex-economista del FMI Kenneth Rogoff coincidí­a recientemente en este diagnóstico durante una conferencia celebrada en Singapur. “Lo peor de la crisis financiera aún está por llegar en EEUU, y uno de los grandes bancos estadounidenses quebrará en los próximos meses”, indicaba.
 
Según Rogoff, profesor de economí­a en la Universidad de Harvard, aseguró que “no serán únicamente los pequeños y medianos bancos los que caerán, sino que uno de los grandes sufrirá tambiíén este mismo destino”. De hecho, "Fannie Mae y Freddie Mac dejarán de existir”.
 
PIB negativo en paí­ses desarrollados
 
Ante este panorama, Roubini avanza que EEUU padecerá la “peor recesión económica de las últimas díécadas”, una vez que desaparezcan los efectos del estí­mulo fiscal aprobado por el Gobierno estadounidense (una inyección próxima a los 150.000 millones de dólares en los últimos meses). En concreto, prevíé una recesión (tasas negativas de crecimiento) en “forma de U” (entre 12 y 18 meses de duración) frente a la V que espera la mayorí­a de analistas (6 meses).
 
Una crisis en forma de L (depresión) es “poco probable”. Sin embargo Roubini considera que la recuperación económica será “díébil” debido a las turbulencias financieras, de modo que “afectará al crecimiento económico en los años venideros”, añade. En este ámbito, Rogoff vuelve a coincidir con Roubini: “el mercado norteamericano se enfrenta a un perí­odo de estanflación (estancamiento económico y elevada inflación) similar al japoníés”.
 
El motivo del alza de precios, según el ex economista del FMI reside en el “mal movimiento de la FED al reducir sus tipos de interíés”. Y es que, no sólo no ha solucionado absolutamente nada (la crisis económica y de liquidez sigue avanzando), sino que tal recorte causará una “gran inflación en los próximos años en EEUU”, tal y como avanzó Libertad Digital. Y ello, debido a la depreciación de dólar.
 
Además, la crisis económica no sólo afectará a la primera economí­a mundial. Las  principales economí­as del mundo tambiíén avanzan hacia la recesión, que será especialmente dura en “Reino Unido, España, Irlanda y Portugal, entre otros”, debido a sus respectivas “burbujas”, ya sean crediticias (elevada deuda) o inmobiliarias, según Roubini. España presenta las dos.
 
Caí­da del mercado bursátil de hasta el 40 por ciento
 
Todo ello, tambiíén se reflejará en la caí­da del mercado bursátil norteamericano. El citado economista advierte de que el “precio de las acciones descenderá de media un 40 por ciento con respecto a sus máximos, frente a la tí­pica caí­da del 28 por ciento de media propia de recesiones pasadas en EEUU”. “Por lo tanto, estamos apenas a mitad de camino del derrumbe del mercado bursátil”, tanto internacional como estadounidense, alerta.
 
“Bernanke no tiene ni idea de economí­a”
 
Y ante todo este panorama, ¿quíé está haciendo la Reserva Federal? Jim Rogers, uno de los inversores de mayor íéxito en el mercado de commodities (materias primas), explica claramente su opinión al respecto.
 
El presidente de la FED, Ben Bernanke, “deberí­a dimitir”. En una reciente entrevista en Money Morning, Rogers considera que la autoridad monetaria deberí­a “haber subido los tipos de interíés (en cualquier caso tendrá que hacerlo). En caso contrario, el mercado terminará haciíéndolo. El problema es que ha metido demasiada basura en su balance”.
 
En este sentido, el inversor avanza que, por el momento, la FED tiene cerca de 400.000 millones de dólares en activos muy dudosos”, gracias a la ventanilla de descuento que puso en marcha para facilitar críédito a los bancos a cambio de colateral crediticio, tal y como adelantó este periódico.
 
“Subir los tipos de interíés ayudarí­a”, indica Rogers. “Provocarí­a un shock en el sistema financiero, pero es que en cualquier caso vamos a sufrir uno. Cada shock, de momento, ha sido peor que el anterior. Bear Stearns fue primero, y luego le han seguido Freddie Mac y Fannie Mae. El próximo shock será aún mayor”, alerta.
 
Su opinión respecto a la valí­a del responsable de la FED no deja lugar a dudas: “Bernanke es un tipo de mentalidad muy estrecha. Ha pasado toda su vida acadíémica estudiando cómo imprimir dinero y ahora le hemos dado las llaves de la imprenta. Todo lo que sabe es lo que está haciendo. Bernanke cree que no hay ningún problema con el mercado inmobiliario en EEUU".

“í‰l es la Fed y la Fed más que nadie deberí­a estar regulando las entidades financieras bajo su supervisión. Pero no ha hecho nada”, indica. “No tiene ni idea de cómo funciona el mercado, no sabe nada de economí­a, ni lo más básico. Sí­, posee un doctorado donde pone economí­a al lado, pero la economí­a tiene más de 200 campos muy concretos. Y su campo es imprimir dinero, donde es un experto, ya nos hemos dado cuenta”, insiste.
 
Según Rogers, “Paul Volcker fue el último banquero central decente de EEUU (gobernó el organismo desde 1979 hasta 1987)”. Y es que, Volcker insistí­a en que “rescatar a los bancos en quiebra va más allá de las funciones de un banco central”. De este modo, Rogers estima que el actual fracaso de la FED supondrá su “desaparición”. “Ya tuvimos dos bancos centrales que desaparecieron por varios motivos”, recuerda.
 
El inicio del fin del dólar
 
Por último, el inversor Rogers advierte de que EEUU ocupa una “posición de dominio económico tan gigantesca que su deterioro durará bastante tiempo. Esto no va a pasar en una díécada o dos”, señala. “Estas cosas tardan mucho en suceder. El declive de Reino Unido duró 40 ó 50 años, ya que tení­an tanto dinero que podí­an continuar a pesar de la espiral descendente”. “Incluso Zimbabwe ha tardado 10 ó 15 años en colapsarse”, explica.
 
Rogers avanza el derrumbe del dólar y, por consiguiente, del mercado financiero internacional tal y como se concibe en la actualidad, puesto que el billete verde sirve como referencia al resto de monedas. “Cuando todo el Gobierno de EEUU tenga sus cuentas en francos suizos estaremos cerca del fin, porque lo harán a pesar de haber instaurado los controles de cambios externos”, concluye.


http://www.libertaddigital.com/economia/el-super-crash-quiebras-bancarias-desaparicion-de-la-fed-y-fin-del-dolar-1276337269/