Fernando Sánchez Dragó: 'España se va a romper porque siempre fue invertebrada'
20 COMENTARIOS EDUARDO MARTíNEZ RICO
En la presente entrevista Sánchez Dragó se muestra más duro que nunca, y critica sin tapujos a la clase política, Internet y los peores defectos del ser español.
Fernando Sánchez Dragó (Madrid, 1936) es uno de nuestros más originales escritores, tal vez el mayor intelectual heterodoxo con el que cuenta España en la actualidad. Ha escrito varios libros sobre nuestro país, como el mítico Gárgoris y Habidis, en el que bucea en nuestros orígenes. De vuelta de todo y por encima del bien y del mal, en la presente entrevista Sánchez Dragó se muestra más duro que nunca, y critica sin tapujos a la clase política, Internet y los peores defectos del ser español.
¿Le duele España?
¿Me toma usted por Unamuno? A mí no me duele nada. Todo eso es retórica barata.
¿Quíé le falta hoy a nuestro país?
Dignidad, autoridad y desigualdad.
¿Quíé le sobra?
Envidia, ira, pereza, queja, sopa boba, mala leche, politización, ideologías, partidos, autonomías, funcionarios, corrección política, puritanismo, frivolidad, televisión, fútbol, redes sociales...
¿Escribir en España sigue siendo llorar?
Vuelve a serlo...
¿Por quíé?
Nadie lee. Y los pocos que leen, leen libros de autoayuda, novelas históricas, culebrones sentimentales, bestsellerones y otras mamarrachadas por el estilo.
¿España se va a romper?
Sí, pero nació rota. Es un país tribal.
¿En quíé se fundamenta?
En lo que dijo Ortega: siempre estuvo invertebrada.
¿Quíé se puede hacer para que esto no ocurra?
Si se lo digo, me meten en la cárcel.
¿Cómo puede ayudar un escritor a su país?
Los escritores no tienen por quíé ayudar a nadie. Lo único que se espera de ellos es que escriban bien.
¿Cómo puede ayudar un ciudadano normal a su país?
¡Quíé manía con la ayuda! Voy a responderle con palabras de Voltaire: cultivando su huerto y desentendiíéndose del que no lo es. Los filósofos ingleses del XVIII y XIX demostraron que sólo el egoísmo es altruista.
Usted es un gran viajero. ¿Cómo nos ven desde fuera a los españoles?
Fiesta, siesta, botellón y fútbol. Gente que vive a costa del sudor ajeno y poco de fiar, aunque simpática durante un ratito. Corto, por supuesto.
¿Por quíé no nos dan las Olimpiadas?
Por lo que acabo de decir. De todas formas, menos mal que no nos las han dado. Habría sido la puntilla.
Ha vivido mucho tiempo en Japón. ¿Quíé podemos aprender de los japoneses?
No estamos capacitados para aprender nada de ellos. Es una asignatura que jamás podríamos aprobar. Más vale que seamos conscientes de nuestras limitaciones.
¿Quíé opinión tiene de nuestra clase política?
Tengo, en líneas generales, muy mala opinión de casi todos los políticos, sean o no españoles. Obama y Hollande, por poner dos ejemplos, me parecen abominables. Me gusta Putin, que es un zar, admiro a Al-Sisi, que es un faraón, me divierte Berlusconi,
¿Berlusconi? ¿En serio?
Si es un cíésar de Suetonio.
¿Y Merkel, la última gran líder?
Respeto a la Merkel.
¿Y en España? ¿No salvaría a nadie?
En España salvaría a Esperanza Aguirre y a Rosa Díez.
Cela decía que todos los políticos eran unos mediocres. ¿Tenía razón?
Sí. Ser político es no ser nada: aire en el aire. Los políticos sólo buscan dinero y poder. Allá ellos. Yo preferiría ser limpiabotas. Mejor que tuercebotas, ¿no?
¿Cree que Rajoy es un hombre honesto?
Para responder a esa pregunta –cosa que nunca haría, porque yo no juzgo a nadie– tendría que haberlo tratado en persona. De los políticos sólo vemos al personaje.
¿Se debería producir un relevo generacional en la política?
¿Generacional? Sospecho que los jóvenes aún lo harían peor. Son animalillos protíésicos. Diría Quevedo: íéranse hombres a una tableta pegados. Tienen tres extremidades inferiores: dos patas y un móvil. ¿Excepciones? ¡Hombre! Alguna habrá.
¿Quíé título le pondría a un libro sobre la España actual?
Caconia, Fiscalia, Futbolia, Jamonia, Asnalfabíética...
¿En quíé está trabajando ahora?
En lo de siempre: en un libro.
En la España de los Siglos de Oro, un momento de grave crisis en lo económico, hubo gran literatura. ¿Cree que ahora se está escribiendo gran literatura?
No. El peor de los clásicos es mejor que el mejor de los modernos.
¿Estamos saliendo de la crisis?
No vamos a salir nunca. Se acabó. Europa (y España con ella) está condenada al tercermundismo. Por mí, que la zurzan.
¿Por razones ideológicas o económicas?
Porque la socialdemocracia es su lacra.
No se pensaba igual hace díécadas
Mire: Keynes es el mayor malhechor de la historia. El estado de bienestar es un genocidio.
¿Quíé debería hacer España, que no está haciendo, para mejorar la situación?
¡Y dale! ¿Quíé tal si la despoblamos? España no es el problema. El problema está en los españoles.
¿Cómo le ha afectado a Sánchez Dragó este momento crítico?
Por primera vez en mi vida gasto más de lo que gano. No tiene sentido trabajar aquí. Somos un país comunista: el Estado se lo queda todo. Voy a tener que largarme.
Usted ha hecho muchísimas entrevistas. ¿Cuál es la clave para hacer una buena?
Entrevistar es como torear. Hay que darle a cada entrevistado su lidia.
¿Cree que las nuevas tecnologías están ayudando a que leamos más?
¡Pero hombre de Dios! ¿Cómo dice eso? Las nuevas tecnologías son herramientas de analfabetos.
¿Y están ayudando a que escribamos mejor?
Queda respondido. Con ellas se regresa al gruñido del chimpancíé y a los grafitis rupestres.
¿Internet está haciendo mejores nuestras vidas?
Internet es el fin del mundo. Se lo ha cargado todo: el libro, el cine, la música, el periodismo, la televisión, la tienda de la esquina, la familia, la amistad, la economía, la inteligencia, los buenos sentimientos, la libertad... Si estamos en crisis es por su culpa. Las redes sociales son la rebelión de la chusma.
¿Cómo le afecta a un escritor Internet?
A mí, en nada. No la utilizo.
¿Y a un periodista?
Enviándolo al paro.