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Argentina recurrirá a la Organización Mundial de Comercio (OMC) para frenar la imposición de aranceles a las importaciones de biodiesel argentino, comunicó la cancillería luego que la Unión Europea anunciara la medida proteccionista.
Esa represalia ocasionara un perjuicio de gran magnitud a una industria que se desarrolló recientemente de manera dinámica e innovadora en el país, advierte un comunicado ministerial.
"Y sumado a su naturaleza claramente proteccionista, no deja otra opción para Argentina que el accionar inmediato bajo el Entendimiento de Solución de Diferencias (ESD) de la OMC, tan pronto como la misma sea puesta en vigor", remarcó cancillería.
La gestión argentina responde, explica el documento, a "asegurar la producción, las ventas externas y el empleo generado en nuestro país por dicho sector".
Los gobiernos europeos acordaron igual represalia contra las importaciones de ese producto desde Indonesia.
La mayoría de los miembros de la UE respaldó la posición de la Comisión Europea de que los dos países incurrieron en un sobreabastecimiento del biodiesel por debajo de los costos o de un precio justo de mercado, lo que se conoce por el vocablo en inglíés "dumping".
El bloque propuso aranceles de 217 euros y 246 euros (300 y 340 dólares) por tonelada de biodiíésel importado desde Argentina, y entre 122 y 179 euros por tonelada importada desde Indonesia.
La medida adoptada por el bloque fue solicitada por la Junta Europea de Biodiesel, asociación que nuclea a las empresas europeas del sector, sin contar con una base legal y factual justificada.
"La decisión de la UE, de claro corte proteccionista, implica en los hechos el cierre del mercado europeo para un producto argentino elaborado de manera eficiente y altamente competitivo", sostiene la cancillería.
El comunicado afirma que Argentina es uno de los productores de biodiesel más eficientes a nivel global.
En contraposición, concluye la nota, la industria europea se encuentra ampliamente sobredimensionada, con empresas que en general no cuentan con materia prima de calidad, no poseen la escala de producción adecuada y carecen de la integración vertical necesaria como para ser competitivas a nivel mundial.
