La inmobiliaria se enfrenta en las próximas fechas al vencimiento anticipado de deuda por 3.000 millones al incumplir los ratios financieros de sus críéditos sindicados.
Reyal Urbis se perfila como la próxima víctima de la crisis inmobiliaria, si un acuerdo con sus bancos acreedores no lo remedia en las próximas fechas. La promotora que preside Rafael Santamaría negocia in extremis la reestructuración de sus críéditos sindicados, cuyas condiciones de vigilancia financiera han saltado por los aires debido a la delicada situación de la compañía, que perdió 331 millones de euros en el primer semestre de 2008, un 874% más.
“Los críéditos sindicados (por importe de 2.371 millones de euros y 470 millones, respectivamente) incluyen cláusulas de vencimiento anticipado o cambio en las condiciones de los príéstamos en caso de incumplimiento de determinados ratios financieros, todos ellos relacionados con los estados financieros consolidados de Reyal Urbis y sus sociedades dependientes.
Los administradores de la sociedad dominate, dado que los citados ratios financieros no se cumplen íntegramente en los estados financieros intermedios consolidados al 30 de junio de 2008, han reclasificado, como pasivo corriente (a corto plazo) la totalidad del importe que, supondría, en su caso, el vencimiento anticipado de los citados críéditos sindicadosâ€, explica la compañía en su informe de gestión, remitido anoche a la CNMV.
Expira el ‘waiver’
La empresa se muestra optimista ante la renegociación de estos 3.000 millones de euros ( básicamente príéstamos sindicados y pólizas de críédito) y ha planteado a s sus entidades acreedores “un documento de tíérminos y condiciones que se encuentra pendiente de la aceptación de las entidades financieras involucradas, pero que a esta fecha se encuentra aprobado por una mayoría significativa de las mismasâ€.
La inmobiliaria cree que “el actual proceso de negociación de la refinanciación de la deuda con las diversas entidades bancarias, incluyendo las que participan en los dos críéditos sindicados, evolucionará positivamenteâ€, puntualiza.
La empresa, que incumplió los ratios de los contratos de críédito el 30 de junio, revela que ha solicitado y obtenido un waiver (dispensa) que la libera hasta la firma del contrato de refinanciación de los incumplimientos de los ratios asociados a uno de los dos príéstamos sindicados (no dice cual) que se incluyen en la refinanciación. Esta dispensa se prolonga durante 65 días naturales siguienes al 30 de junio. Es decir, expira el próximo 3 de septiembre.
Pese a todo, Reyal Urbis cuenta con salvadores entre los bancos. La empresa ha conseguido vender desde el 30 de junio promociones por 400 millones de euros a una sociedad participada por ella misma y Banesto, su principal acreedor. Asimismo, la empresa revela ventas de suelo por valor de 690 millones de euros sin indentificar el comprador. Fuentes del mercado identifican a varios bancos entre los compradores, entre ellos el propio Banesto. Esta información no ha podido ser confirmada.
Entre los meses de abril y agosto de este año, la inmobiliaria dice haber reducido su endeudamiento neto en un total de 1.320 millones de euros gracias a ventas de activos, con lo que el endeudamiento total del grupo actualmente se sitúa en 4.725 millones de euros.
HACE UN MES 26/07/2008:
Banesto presta ayuda a Reyal Urbis a vender sus pisos
La ‘joint venture’, que se constituyó hace tres semanas, ha invertido entre 300 y 400 millones en activos de la inmobiliaria.
Banesto no se olvida de sus antiguos compañeros de viaje. El banco se ha aliado con Reyal Urbis para crear una sociedad conjunta, Promodomus, que se ocupará de “dotar de una mayor eficiencia a la gestión de promociones y activos de la inmobiliariaâ€, según explicó a este diario un portavoz de la entidad financiera. Promodomus se creó hace apenas tres semanas, un 51% de su capital pertenece a Banesto y el 49% restante a Reyal Urbis.
Aunque el banco no ha querido revelar cuánto se ha invertido en la compra de activos de la inmobiliaria, fuentes del mercado aseguran que la cifra se sitúa entre 300 y 400 millones de euros. El objetivo de esta operación es que Promodomus compre promociones terminadas y otros activos de la inmobiliaria para, posteriormente, gestionar su proceso de venta, en un momento en el que el mercado está casi parado.
De esta forma, se lograría aliviar la presión sobre Reyal Urbis, que, a 31 de marzo de este año, contaba con una deuda de 6.045 millones de euros, además del vencimiento de un príéstamo de 500 millones de euros a finales de 2008.
Ex accionista
El banco que preside Ana Patricia Botín fue accionista mayoritario de Urbis hasta finales de 2006, cuando vendió su 50,26% a Reyal por unos 1.670 millones de euros, obteniendo unas plusvalías de 1.181 millones. En aquellas fechas, el sector inmobiliario español aún gozaba de óptima salud y, aunque varias voces hubiesen empezado a advertir de la necesidad de un ajuste, los expertos apostaban por una desaceleración suave.
No fue así. La crisis financiera que se desató el pasado verano, a raíz de las hipotecas subprime de EEUU, ha contribuido a que la ralentización se transformara en un frenazo. Los bancos han empezado a tener problemas de liquidez y para las inmobiliarias se ha hecho cada vez más complicado refinanciar sus abultadas deudas, así como encontrar financiación para desarrollar nuevos proyectos.
A estas dificultades se ha unido el parón de las ventas, complicando aún más la situación financiera de las promotoras.
El último ejemplo ha sido el concurso de acreedores de Martinsa Fadesa. Los números explican la situación: el pasado marzo, el saldo vivo de la financiación bancaria a inmobiliarias alcanzó los 311.274 millones, lo que supone un incremento interanual del 17,62%. En marzo de 2007, el ritmo de crecimiento rozaba el 46%.
Colonial
El plazo de carencia que tenía la inmobiliaria Colonial para no pagar sus críéditos venció el pasado jueves, sin que la banca con la que negocia la refinanciación de sus casi 9.000 millones de deuda lo renovara, según ha comunicado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La compañía presidida por Juan Josíé Bruguera recordó que continúa “abierto†el proceso de renegociación de su deuda con las entidades acreedoras, que comenzó el pasado 9 de julio y que le obligará a vender parte de sus activos. La toma de control de Colonial por parte de la banca ha dado un nuevo giro a los planes de la firma.
Los nuevos accionistas, entre ellos, La Caixa y el Banco Popular, se están planteando conservar entre el 51 y el 60 por ciento de la filial francesa SFL, para mantener el control y seguir beneficiándose de las ventajas fiscales galas.
En números rojos
- Reyal Urbis tendrá que hacer frente al vencimiento de un príéstamo de 500 millones de euros en diciembre de 2008.
- La deuda de la inmobiliaria ascendía en marzo a 6.045 millones de euros, equivalente al 57% de sus activos.
- La sociedad conjunta Promodomus podría haber invertido entre 300 y 400 millones de euros en la compra de activos de Reyal Urbis para inyectarle liquidez.
- La financiación bancaria a inmobiliarias en marzo alcanzó los 311.274 millones.