Navantia, los astilleros públicos militares, se convierten en candidatos a construir los cuatro buques que necesita Gas Natural. Fuentes conocedoras del proceso aseguran a este periódico que el desbloqueo de la Comisión Europea el próximo 31 de diciembre de 2014, fecha en la que finaliza la obligación para Navantia de que su negocio civil no supere el 20 por ciento de la facturación, abre la puerta a que la empresa presidida por Josíé Manuel Revuelta puje por quedarse con todo o con parte del contrato de gaseros en lucha con los astilleros coreanos.
Según estas mismas fuentes, la intención es que los astilleros de Ferrol y de San Fernando (Cádiz) de Navantia, junto con La Naval de Sestao, presenten una oferta conjunta de garantías para ganar la licitación, que debería decidirse antes de que finalice el año.
Aunque un portavoz oficial de Navantia guarda discreción y no hace ningún comentario al respecto, desde la industria se da por hecha esta oferta conjunta que sería una tabla de supervivencia para el sector naval español en el caso de ser elegida.
Empresa competitiva
Navantia es competitiva en precio, plazos y tecnología. De hecho ya fabricó entre 2000 y 2007 seis buques similares de transporte de gas licuado (LNG) en menos plazo del que se requirió en ese momento y con satisfacción de cliente, que hasta la fecha no ha tenido ningún problema con esos barcos, mas allá de las revisiones establecidas.
En el caso de lograr el contrato, la industria naval calcula que daría empleo a 6.500 personas al año durante tres ejercicios en los tres astilleros antes comentados y supondría unos 12 millones de horas de trabajo. De esta cantidad, aproximadamente 400.000 horas serían de ingeniería, lo que supone empleo de alto valor añadido.
La semana pasada, la Asociación y el Colegio Oficial de Ingenieros Navales hicieron un comunicado en el que aseguraban que España tiene la tecnología suficiente para construir estos buques gaseros. En este escrito realiza una enumeración de buques que la industria española naval ha construido en la última díécada para Elcano y Knutsen, los dos armadores elegidos por Stream, la sociedad de gestión formada por Gas Natural y Repsol que se extingue a final de año. Así, para Knutsen se han ensamblado el Cádiz por Navantia Puerto Real, mientras que el Bilbao y el Sestao Knutsen se encargaron a La Naval de Sestao. En el caso de Elcano, el buque Castillo de Villalba fue construido para el armador en las instalaciones de Navantia en Puerto Real. Tambiíén se contrataron otros gaseros de características similares por la antigua naviera Tapias.