Por... TERRY COLLINS
Samsung Electronics, el fabricante de telíéfonos móviles más grande del mundo, ha propuesto incorporar a los telíéfonos un sistema antirrobo que los desactivaría cuando al aparato sea robado o se pierda, pero las compañías de telefonía más grandes de Estados Unidos han rechazado la idea, aseguró el principal fiscal de San Francisco.
El fiscal de distrito George Gascón dijo el lunes que las operadoras AT&T Inc., Verizon Wireless, US Celular Corp., Sprint Corp. y T-Mobile US Inc. rechazaron la propuesta de Samsung para que sus telíéfonos tengan desde fábrica un software antirrobo como característica estándar.
La rama de la telefonía móvil alegó que el programa —llamado Absolute LoJack y conocido como "kill switch" (interruptor de desactivación)— no es la respuesta para detener o disuadir a los ladrones de telíéfonos inteligentes, ya que tambiíén podría permitir a un "hacker" desactivar el telíéfono de alguien.
Gascón, el fiscal general de Nueva York Eric Schneiderman y otros funcionarios encargados del cumplimiento de la ley han estado pidiendo que los fabricantes creen "interruptores de desactivación" para combatir el creciente robo de telíéfonos multiusos en todo el país.
Casi uno de cada tres robos en Estados Unidos involucra el robo de telíéfonos, de acuerdo con la Comisión Federal de Comunicaciones.
Los dispositivos móviles perdidos y robados —en su mayoría smartphones— le costaron a los estadounidenses más de 30 millones de dólares el año pasado, según un estudio citado por Schneiderman en junio.
Directivos de Samsung dijeron en julio a la fiscalía de distrito de San Francisco que eran las compañías de telefonía quienes se resistían a los "interruptores de desactivación" y los fiscales revisaron recientemente los correos electrónicos sobre el tema entre un vicepresidente síénior de Samsung y un desarrollador de software.
Un mensaje en agosto decía que Samsung había preinstalado el software interruptor de desactivación en algunos smartphones listos para su venta, pero que las operadoras telefónicas ordenaron que se retirara como una característica estándar.
"Estos mensajes indican que las compañías están rechazando una solución tecnológica para que puedan continuar extorsionando a sus clientes por miles de millones de dólares en primas de seguros (en caso de robo)", dijo Gascón.
"Estoy indignado.... Esta es una solución que tiene el potencial de evitar que los clientes sean víctimas" de la delincuencia, agregó.
Samsung dijo que está cooperando con Gascón, Schneiderman y las operadoras en una solución antirrobo, pero se negó a comentar específicamente sobre los mensajes de correo electrónico.
Aunque los populares smartphones Galaxy de Samsung se venden en todo Estados Unidos sin el programa LoJack preinstalado, los usuarios pueden pagar una cuota de suscripción para contar con el servicio.
"Los ladrones no pueden hacer nada con el dispositivo a menos que tengan la clave de identificación del usuario, algo que no tienen", dijo Ojas Rege, vicepresidente de estrategia en Mobile Iron, una compañía de software de seguridad en Mountain View, California.
"El interruptor de desactivación aborda este asunto sin que los operadores tengan que hacer nada", dijo Rege, quien agregó que íél no cree que la supuesta sed de ganancias de las empresas explique su resistencia a aplicar esta tecnología.
"Esa no es la principal prioridad para los fabricantes. A ellos los motiva crear la próxima gran función novedosa para sus telíéfonos inteligentes", opinó.