Los inversores bajistas o cortos, aquellos que toman posiciones en los valores cotizados con la pretensión de obtener beneficios cuando los títulos caen, elevaron su presión como nunca sobre cuatro empresas españolas. En concreto, jamás habían alcanzado una posición tan alta en las hoteleras Meliá y NH, la compañía de ingeniería Tíécnicas Reunidas y la de celulosa y energía Ence. Es el aspecto más destacado de los datos difundidos este lunes por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que recogen la evolución de las posiciones cortas durante la segunda quincena de noviembre. Y eso que el balance general transmite otra impresión, porque han reducido su presencia en diez cotizadas y las han elevado en siete.
El caso más destacado es el de Meliá, donde los bajistas han crecido del 8,35 al 9,16% del capital. Ningún otro valor soporta una presión mayor. En la última quincena, Citadel Europa, BNP Paribas, Highbridge Capital Management, Polygon Global y GLG Partners han incrementado sus posiciones cortas en la hotelera. Citadel, Highbridge, Polygon y CQS acumulan ya cada uno de ellos más del 1% del capital de la compañía.
La presunción de que los inversores creen que las cadenas hoteleras deben corregir su valor en bolsa se ve reforzada por el hecho de que NH tampoco había visto a tantos bajistas en su capital. En total, tienen el 2,42% tras haber subido 0,09 puntos porcentuales entre el 15 y el 29 de noviembre. Las acciones de NH y Meliá se revalorizan un 58% en lo que va de año.
En Tíécnicas Reunidas, el zarpazo de los bajista crece del 3,51 al 3,81% del capital. Los títulos de la empresa de ingeniería acumulan una subida del 12% en 2013 y ahora luchan por reconquistar los 40 euros.
En cuanto a Ence, registra el mayor incremento, puesto que los cortos casi se duplican, al pasar del 0,44 al 0,80% del capital. En este caso, la presencia bajista se concentra en sólo unas manos, las de Otus Capital Management, que acapara ese 0,8%.
Además, la sombra de los bajistas se ha alargado en Abengoa -del 1,33 al 1,43%-, en FCC -del 1,87 al 1,91%-, Indra -del 5,85 al 6,45%-. Otra nota destacada es que Telefónica y Santander son los dos grandes valores del Ibex que siguen viendo a los bajistas en su capital. No poseen mucho, apenas un 0,2%, pero el caso es que siguen presentes.
En cuanto a los descensos, los más acusados se registran Viscofan -del 1,30 al 0,84%-, Sacyr -del 1,14 al 0,69%-, ACS -del 0,88 al 0,45%-, Acciona -del 3,44 al 3,05%- y Acerinox -del 4,80 al 4,41%-. Tambiíén reducen su presencia en Dia, Mediaset, Ebro, Banco Popular y Abertis.
Otra forma de invertir
Las posiciones cortas o bajistas representan una opción más que tienen a su alcance los inversores para operar en bolsa. A diferencia de las posiciones alcistas o largas –más habituales-, en las que los inversores ganan cuando compran a un precio y venden luego a otro más alto-, en las bajistas o cortas las ganancias se producen cuando el precio de las acciones cae.
La clave reside en adelantarse a ese descenso tomando prestados en el mercado títulos de esa empresa que son propiedad de otro accionista. Por ese príéstamo, el bajista le pagará a ese accionista unos intereses en concepto de alquiler temporal. En cuanto las tiene en su poder, el inversor bajista vende esas acciones que ha tomado prestadas a la espera de que en el futuro caigan. Si eso ocurre, las recompra a un precio más barato, con lo que se embolsa la diferencia entre el precio de venta inicial -más alto- y el precio de recompra posterior -más bajo-. Parte de esta ganancia será empleada por el inversor bajista para pagar los intereses por el alquiler de las acciones; el resto será su beneficio. Por su parte, al tíérmino de la operación el accionista original volverá a tener los títulos en su poder y se habrá llevado el importe de ese alquiler -los intereses-.
En todo este proceso, el inversor a corto está asumiendo el riesgo de que su intuición no se vea premiada. Si, en contra de lo que cree, las acciones suben, sufrirá las píérdidas correspondientes al pago de los intereses y la recompra de los títulos, para devolvíérselos al accionista, a un precio mayor.