Reuters
Las firmas como Sinopec, Gazprom. y Petrobras están incrementando su comercialización, mientras los bancos abandonan la comercialización de minerales y petróleo, resaltan expertos.
Los bancos de Estados Unidos y Europa que han abandonado la comercialización de materias primas han dejado un espacio que están ocupando firmas de Rusia, China y del Golfo Píérsico, en un intento por ejercer un mayor control sobre el precio de los recursos básicos de los cuales dependen sus economías.
La petrolera estatal rusa Rosneft compró la semana pasada la unidad de comercialización de crudo de Morgan Stanley, una de las mesas de operaciones más grandes y antiguas de Wall Street, en medio de los esfuerzos de los bancos por reducir su exposición a la intermediación.
Las empresas estatales se están uniendo a firmas de intermediación, como Glencore y Vitol, y a grandes petroleras, como BP y Shell, para aprovechar la retirada del sector de los bancos, por la mayor regulación de las actividades bancarias que siguió a la crisis financiera del 2008.
Los ejecutivos de grandes corredurías dicen que no pasará mucho tiempo antes de que ese tipo de acuerdos se repitan, porque esperan que una nueva clase de rivales les disputen su supremacía en el negocio de contactar a compradores con vendedores de materias primas, predominantemente de petróleo.
“El negocio de comercialización de materias primas está en un periodo de cambio en este momento, y pienso que el mazo se está barajando tanto para los participantes que habrá como para el modo en que se conducirá el negocioâ€, dijo a Reuters el mes pasado David Messer, presidente ejecutivo de la firma comercial estadounidense Freepoint Commodities.
“Los bancos están abandonando la comercialización de materias primas físicas. Por otro lado, están los nuevos participantes, las grandes empresas estatales, Sinopec, Gazprom, Petrobras. Son todas entidades que están incrementando sus capacidades de comercializaciónâ€, agregó.
Morgan Stanley no es el único que se está retirando del comercio de recursos naturales. De sus cuatro rivales más grandes, Deutsche Bank ya lo hizo, Barclays ha reducido en un quinto sus operaciones, J.P. Morgan tiene su negocio a la venta y el líder Goldman Sachs está sosteniendo su posición.
Según fuentes, entre los interesados en el negocio de JPMorgan está BTG Pactual, un banco privado de Brasil, una potencia de materias primas. El banco estadounidense no hace comentarios sobre la venta.
La rusa Gazprom, el mayor productor de gas del mundo, ha levantado una importante división de comercialización de gas en Londres y Singapur, mientras que el mayor exportador petrolero del mundo, Saudi Aramco, tambiíén ha empezado a desarrollar operaciones de este tipo.
“Vamos a ver a compañías petroleras nacionales (…) intensificando su comercio para poder establecerse en lo alto de la competencia de un sector que ya está sobrepobladoâ€, dijo a Reuters el mes pasado Torbjorn Tornqvist, presidente de la correduría Gunvor.
China es determinante
Marco Dunand, jefe de la firma bursátil Mercuria, dice que con el tiempo China se convertirá en una de las fuerzas dominantes para fijar los precios referenciales de las materias primas.
“China desarrollará el mercado de materias primas de la misma forma en que Europa o Estados Unidos desarrollaron un mercado interno con oportunidades de arbitraje, almacenamiento y logística. Y tambiíén creemos que con el tiempo, China abrirá el mercado de materias primas a una atmósfera más competitivaâ€, declaró el mes pasado durante el encuentro Reuters Summit.