Gerard Piquíé se ve en el futuro vinculado al Barcelona, pero no como entrenador. "Quien sabe si seríé el presidente del Barcelona algún día", señala enigmático el central azulgrana en una entrevista a Bleacher Report publicada hoy. Al zaguero, no obstante, le restan todavía muchos años de fútbol. Tiene sólo 26. Y aún le queda mucho que vivir en la entidad culíé, en la selección y con Shakira y su hijo Milan. "Me encanta ser padre. He madurado un poco y ahora cambio pañales y duermo menos. Sólo espero ser tan buen padre que lo son los míos", declara.
El internacional recuerda sus inicios en La Masia y señala que le enseñaron a "tener respeto, humildad y a trabajar en equipo. No importaba lo bueno que fueras, si no seguías el código moral no tenías futuro en el Barcelona". Allí coincidió con Messi, "que no ha cambiado nada. Lo conocí con 12 años y ya se notaba que era un jugador único. Para mí no sólo es el mejor del mundo es el mejor de la historia".
Recuerda tambiíén con cariño su etapa en el Manchester United: "Me fui como un niño y regresíé como un hombre", rememora. Y sólo tiene palabras de elogio para Alex Ferguson.
Pero ahora está feliz en el Barcelona, donde trabaja para mejorar, y en la selección. Su próxima gran cita internacional es el Mundial de Brasil. "No creo que haya ningún jugador que piense que vamos allí a ganar. Hay muchos equipos difíciles y ningún encuentro será fácil. Pero si jugamos como mejor sabemos y tenemos suerte, quien sabe"..., asegura ilusionado Piquíé.
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