BBVA está implementando un plan para que los gastos de personal y administración se reduzcan del 30% que representan en la actualidad sobre el total de los costes del grupo al 22%, un porcentaje con el que se equipararía a otras empresas comparables por tamaño en España y Europa. El proyecto, bautizado como Níquel, está en su fase inicial y en este momento el banco analiza de quíé departamentos de los servicios centrales se puede recortar, según fuentes financieras. No se prevíén despidos, pero sí un aumento de las prejubilaciones voluntarias.
Un estudio encargado por el BBVA descubre que sus gastos corrientes superan a los de otras grandes empresas, no sólo bancarias, de España y de otros países de Europa como Francia y Alemania. Según ha podido saber Invertia, este informe revela que los costes de personal, administración y otras partidas representan el 30% del total, frente al 22% de media de las compañías analizadas. Una evidencia de que la entidad podría estar sobredimensionada en algunas áreas. Por ello, quiere mejorar su eficiencia de costes y recortar esa distancia.
Con este propósito nace el Proyecto Níquel. Buscará “optimizar los medios y los recursos del grupoâ€, explican fuentes sindicales del banco. En esta línea, está previsto eliminar duplicidades, intensificar la informatización de todos los departamentos y recortar en aquellos gastos que resulten prescindibles.
El proceso implicará reubicaciones y prejubilaciones voluntarias, aunque aún no hay cifras certeras ni se ha establecido un programa especial. La empresa ha iniciado un análisis en profundidad de los distintos departamentos de los servicios centrales que se prolongará hasta abril para decidir quíé se puede recortar. A partir de abril y hasta julio analizará otras áreas del grupo, tanto en España como en el resto de países donde opera, en las que tambiíén existen ineficiencias. El plan se implementará a lo largo de 2014 y 2015.
De hecho, en algún departamento de las oficinas de Azca, en Madrid, ya ha comenzado a hacerse efectivo, con la prejubilación de varias decenas de trabajadores. A lo largo de 2013, el banco ya prejubiló a alrededor de 900 empleados, según fuentes sindicales. Una cifra no confirmada oficialmente. En todo caso, la lista de trabajadores que quieren jubilarse anticipadamente es “interminableâ€. El banco siempre ha utilizado esta fórmula con cargo a los beneficios.
En principio, el plan no contempla “despidos ni ningún expediente de regulación de empleo (ERE)â€, señalan las mismas fuentes. Hace dos semanas, ante los rumores internos que surgieron en torno a que el Proyecto Níquel podría implicar despidos, la sección sindical de UGT en el BBVA emitió una circular un tanto alarmista en la que denunciaba la falta de transparencia de la dirección del banco y pedía que aclarara si el plan conllevaría la reestructuración del grupo y quíé consecuencias tendría sobre el empleo. La entidad ha tranquilizado a los trabajadores y ha garantizado que no habrá salidas forzosas.
Desde que comenzó la crisis, hace ya más de cinco años, el BBVA no ha utilizado ningún plan de salidas de empleados, a excepción del ERE pactado en la plantilla de Unnim, entidad que adquirió en 2012.
MíS DE 10.000 MILLONES EN 2013
Al cierre del tercer trimestre de 2013, el banco azul contabilizaba 113.293 empleados en todo el mundo, sin incluir Garanti ni los servicios externalizados, frente a los 115.852 que había al cierre de 2012. Esto supone un descenso del 3,6%. De ellos, 31.102 corresponden a España, 595 menos (-1,9%).
Los gastos de personal del grupo ascendían a 4.362 millones de euros en septiembre pasado, un 4,2% más que los 4.190 millones de un año antes (en todo 2012 alcanzaron los 5.662 millones). Del total, los sueldos acaparaban 3.301 millones (+2,6%), las cargas sociales (679 millones) y los gastos de formación y otros 384 millones (+9,6%), según se detalla en el informe financiero trimestral.
Mientras, los gastos generales de administración se situaban en 3.147 millones, un 4,3% más que en el mismo periodo de 2012 (4.106 millones en todo el año). Por partidas, el banco había destinado 708 millones en inmuebles entre enero y septiembre (+3,4%); 597 millones en informática (8,9%); 228 millones en comunicaciones (-7,4%); 288 millones en publicidad y promoción (+4,6%); 76 millones en gastos de representación (+6,8%); 925 millones en otros gastos (+5,2%); y 325 millones en contribuciones e impuestos (+4,4%).
En conjunto, estos gastos alcanzaba los 7.511 millones en septiembre, un 4,2% más. De mantener este ritmo en el cuarto trimestre, habrá superado los 10.000 millones en 2013 (9.768 millones en 2012).
